Siento en el pecho una daga que me
abre y me apena, es la ausencia de la
amada, que marcho en una noche
como esta.
Sentir la tortura del amor que fue
marchito, envolviéndose en los
hilos de una falsa convivencia.
Tocar con las manos el cielo.
Llegar al delirio extremo.
Suenan clarines y trompetas, música
que lleva mensajes, música que me
mantiene despierto.
Cuerpo abrasado, en un abrazo que
era eterno, marcas de dedos ardientes,
que en mi dejaron sus huellas.
El espacio era largo, nubes negras de
tormentas, lagrimas que eran diluvio,
rio que al mar se las lleva.
Cantó el pájaro sabio en la rama que
en ella se sustenta, no quise atender
su ruego, lejos llegó la repuesta.
Unas nubes se posaron en mis ojos,
humo que lleno la estancia, bruma que
cubrió los velos, de pensamientos
ajenos.
El cantor tocó la flauta.
Lanzó sus versos al aire.
Y las palabras sonoras, hablaban de mil
amores.
Quedé en la negra oscuridad, de un pesar
que me quemaba.
No lo sabía superar.
El puñal que me sangraba, en mi corazón
abierto.
Era fatal consecuencia.
Pasó el tiempo....
GRAN CANARIA...
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Un gusto disfrutar de la lectura de sus bellos y profundos versos. Saludos cordiales escritor.
gracias amiga por tus amables palabras...un abrazo fuerte...
Gracias por participar
gracias amigo por tenerte como amigo...
Se agradece tu participación, Arnoldo.
gracias por la invitación...
gracias amiga por tus amables palabras... un abrazo.
Arnoldo:
Muy sentimentales letras. Me gustó mucho tu trabajo. Felicitaciones, poeta.
gracias amiga por tus amables palabras... un abrazo.
Muy bello su poema.
gracias amiga por tus amables palabras ..un abrazo.
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
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