Por: Iris Girón Riveros
Sus ojitos fijos, brillosos y negros
miran a la infante con ideal dulzura
su corazón tierno late muy contento
y se regocija con su can tan noble.
Con Soncco descansa, juega y conversa
es su compañero de infantes jornadas
es tan pequeñito, piel de terciopelo
en quien su ternura vuelca amoroso.
Él es su perrito, su buen confidente
le mima, le abraza, le brinda cuidados
moldea mohines de suave ladrido
prodiga abrigo a su grácil cuerpo.
De humildad inefable, como es su dueña
la mira contento, su colita mueve
ella con un beso sella el sentimiento
con lenguaje de ángel a su leal amigo.
Simbiosis de niña con lindo cachorro
es cual azul cielo con nubes muy albas
Corazón, su nombre en idioma quechua
es la compañía de la buena niña.
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¡Ternura infantil ante su amada mascota, Iris!
Agradecida por tu gentil comentario, Benjamín.
¡Precioso poema!
Agradezco mucho, querida Delia,
tu amable comentario.
Felicitaciones, amiga Iris, por el sentimental homenaje,a tu querido amigo peluche.
en tu poema. Recibe un cordial saludo.
Muchas gracias
estimado poeta Nolbert,
por tu presencia en mis letras,
felicitándome gentilmente.
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