EL EJEMPLO NAFASTO DE LA CAÍDA DEL IMPERIO ROMANO
Y VENEZUELA HOY
El caos que vive Venezuela desde hace dieciocho años trae a la reflexión lo que ocurrió en la Roma imperial a partir del siglo III d.C. hasta su disolución, denominada por la historia: EVOLUCIÓN Y DECADENCIA DEL IMPERIO ROMANO.
El fenómeno político más destacado del siglo III romano es la revolución militar de Septimio Severo, que luego de realizar una carrera política había entrado en el Senado en el año 172 d.C. durante el reinado de Marco Aurelio, último Emperador que tuvo en paz a la Roma imperial. Luego fue Septimio Severo, sucesor de Marco Aurelio, quien debilitó para siempre el poder del Senado y lo entregó a las legiones. Con ello se dio el primer paso hacia la caída del Imperio Romano: Sin Senado y perdido en la disolución de una obra de siglos.
El Senado romano representaba a un vasto Imperio de 80 millones de habitantes, extendido a pueblos diversos y antagónicos desde las riberas del Rin hasta el Éufrates. Ya no tenía la fuerza ni la unidad construida por el Imperio en decadencia.
A fines del Imperio Roma vivía de la riqueza, el lujo y el ocio Era un mundo cortesano el de los patricios, mientras el Senado ya no representaba la unidad de ley y de autoridad.
El gobierno imperial se había caracterizado en lo sucesivo, además de por las victorias militares, por el reforzamiento del poder imperial frente al Senado. Fue entonces cuando el Imperio fue perdiendo sus instituciones. Con el Senado cae también lo que había de latino y de romano en el Imperio. La tradición del gobierno fue desapareciendo y se extinguió el gobierno electivo y el formulismo jurídico que luego se ha difundido en los continentes y países apegados al Derecho Romano.
También por esa época Roma vive turbulentos años cuando las revoluciones militares se suceden: los bárbaros tienen puerta franca para entrar en el Imperio, los godos cruzan el Danubio, los francos caen sobre la tierra Galia, para cambiar el curso de la historia que Julio César había creado con su invasión en tanto procónsul triunfante.
Crisis política, crisis económica. Tales fueron circunstancias que impulsaron la caída del Imperio Romano.
Progresivamente fue burocratizándose el Imperio, entregándose a funcionarios sin formación y dispuestos a obtener la riqueza y el poder que había tenido Roma imperial. En el orden económico el Estado es intervencionista y continúa depreciándose la moneda con la consiguiente depauperación del pueblo. En tiempo de Diocleciano se llegó a una extrema carestía de la vida, que el Emperador quiso remediar por un edicto que fijaba precios a los artículos de consumo.
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El relato que antecede es casi un retrato de la situación de Venezuela desde 1999 hasta el día de hoy. Lo he compuesto para que lo conozcan otras gentes de países de naciones semejantes o costumbres distintas. Bastaría que mirasen la televisión o acudan a Internet para comprobar las semejanzas entre lo que ocurrió en un Imperio insuperable y un país como Venezuela, pleno de gente con valores morales y espirituales, trabajadora y creativa.
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Amigo mío:
No pretendo hablar de política por ningún respecto. He sido apolítico desde la juventud, sin intervenir en acciones políticas, gobierno u oposición.
Los soviéticos -Rusia que ya no es soviética - está en tierra venezolana para auxiliar al usurpador maduro, pero de modo primordial para cobrar lo que Venezuela le adeuda a ese país y no tiene el dinero para pagar. No es un dominio político - territorial sino la presencia de Shylock (de quien no tengo motivo para abominar, porque cobraba lo que se le debía, a cambio de una libra de carne en caso de incumplimiento del contrato: respeto al judaismo y en muchas cosas los admiro).
Así pues. no es tema político sino de cobrador el de Rusia.
Gracias y saludos.
Alejo
¡Terrible, verdaderamente terrible, la situación que vive Venezuela, Alejo!
AMIGO POETA...MUY EMOTIVO TU RELATO...
Hallo válida la comparación, querido Alejo. Entiendo que un imperio ha de caer por las consecuencias de sus propios excesos, tal como está sucediendo con las llamadas potencias del planeta. La propaganda manipulada por los gobiernos, que son unos títeres también manipulados, procura, aunque, cada vez con éxitos menores, hacer creer que todo está creciendo, cuando, en realidad, lo único que crece es la diferencia entre clases sociales. Abordas un tema interesante y me gusta dar mi opinión en asuntos de política internacional, materia en la que opino más por intuición que por conocimiento específico. Abrazo de austral resiliencia a tiranos y otros entes insolventes.
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