Con gran necesidad de amar,
cruzó la ancha y oscura acera,
tuvo suerte al encontrarla,
y empezó sin cesar a adorarla.
Cuando su rostro hermoso acariciaba,
se retiraba el caos y la soledad,
su amor tanto tiempo inapresable,
lo aceptó con amorosa bondad.
Celos,disgustos y manías,
se fueron todos alejando,
cerca de ella platicando,
eran deliciosos los dias.
Ya no será como antes el sufrir,
cuando estaba desprovisto
de su beso exquisito,
ni solo, ni navegando,
como una botella naufragando.
J.Jesús Ibarra Rodríguez.
DC.UHE.
D.R.México.2015.
Comentario
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
© 2025 Creada por Aimee Granado Oreña-Creadora.
Con tecnología de
Insignias | Informar un problema | Política de privacidad | Términos de servicio
¡Tienes que ser miembro de ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME para agregar comentarios!
Únete a ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME