Apariencias

[Donald]

Puede parecer,

que la distancia es mayor a mi presencia.

Espero,

siéntelo como un acercamiento.

Desde mi torre del vigía,

 oteo la lejanía, haciendo el horizonte mío.

A veces 

escucho al viento cual sollozo,

como coro al ave peregrina en vuelo,

buscando la gota de cristal en tu rostro,

esperando en el confín, antes del final,

el susurro con perfumes de gardenias. 

Abrazado a la espera,

sin saber si en las distancia estas presente,

o quizás el viento te alejo de mi querencia,

 y estoy aquí, como la estrella espera la noche,

la alborada su amanecer,

el mar en el horizonte, el beso del cielo espera.

Puede parecer.

Donald-27-01-2020

[Hugo Mario Bertoldi Illesca]

¡Bonito, Donald! Agradezco compartir esta creación que disfruté leyendo, querido amigo. Abrazonrisas de mono. 

[Jhonny Olivier Montaño]

ME HA GUSTADO MUCHO EL POEMA AMIGO DONALD

TIENE UNAS HERMOSAS E INTERESANTES IMÁGENES LITERARIAS

MUCHAS GRACIAS POR COMPARTIR.

[Ernesto Kahan]

Querido Donald,

¡BRAVO, por este poema grandioso que siento, de lírica que atrapa.

[Ingrid Zetterberg]

Muy hermoso tu poema, estimado Donald....me encantó esta última estrofa:

Abrazado a la espera,

sin saber si en las distancia estas presente,

o quizás el viento te alejo de mi querencia,

 y estoy aquí, como la estrella espera la noche,

la alborada su amanecer,

el mar en el horizonte, el beso del cielo espera.

Puede parecer.

Recibe mi felicitación y mi abrazo.

[Maria Mamihega]

MUY BUENAS METÁFORA,UN GRAN POEMA, MIS FELICITACIONES.

[kin Mejia Ospina]

Interesante poema,un abrazo poeta.

[Aimee Granado]

A veces 

escucho al viento cual sollozo,

como coro al ave peregrina en vuelo,

buscando la gota de cristal en tu rostro,

esperando en el confín, antes del final,

el susurro con perfumes de gardenias. 

Pueden parecer tantas cosas amigo Donald y en medio de la incertidumbre encontrar las respuestas a nuestros enigmas y silencios. Escuchar el viento, abrazar la brisa, acariciar la nostalgia y sentir el aroma del tiempo que nos habla de esa apariencia sin nombre que suele ensortijar amaneceres, ocasos, noches de desvelos y el mar en ese horizonte que espera buscando como bien dices, la gota de cristal en ese rostro que ha inspirado lo sublime entre letras.

Muy bellas metáforas que empleas en este divino poema que revela su elocuencia y belleza.

Destaco tu publicación.

¡Felicitaciones!