En ese huerto de la tierra entera
por una lluvia que deviene en llanto
se sacuden los ritmos de aquel canto
que redobla por la voz de los vientos.
Es que los ecos de la primavera
van pregonando en un breve murmullo
el sueño dulce que siembra su arrullo
en las semillas que vuelan por cientos.
No hay que nombrarla para que florezca
tiene la vida temblando en un verso
se desespera por otro universo
que tenga el tiempo en los ojos abiertos.
Porque en la hora en que el aire perezca
adormecido en la cuenca de un río
será preciso comprobar que el frío
reina en los campos que lucen desiertos.
Etiquetas:
Bonito poema
Versos llenos de esperanza.
Saludos y buenas noches.
Hola. Buena tu inspiración.
Saludos.
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