CONDIMENTO

En un vuelo por mi hogar

su presencia así nos brinda

haciendo en mi…

GRATITUDES

Gracias al Sol

por la luz fascinante

que me regala.

Gracias, ¡oh! río,

por librar a mi cuerpo…

GOLONDRINA

¡Oh golondrina!
No detengas tu vuelo
tan misterioso.

CUANDO CANTAS CON AMOR

Cuando cantas con amor

tus secuencias atrayentes,…

  A continuación, lectores de esta OME, desarrollaré una rara comparación entre dos célebres representantes de las ciencias médicas y científicas, mismos que coinciden en contemporaneidad, aunque, quizás, no en ideales específicos. Esta presunción corre por mi cuenta, aclaro, y podría demostrarse que no es exactamente como lo intuyo. 

Tedros Adhanom…

¿USTED QUÉ SABE?





Usted qué sabe de mis sueños

de mis huesos fragmentados

de mi carne hecha jirones…

En tu amabilidad arrebatada

tu das grandiosidad con gallardía

honorabilidad tu cofradía…

Tanka -IV-

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Las aves vuelan…

EL REGRESO

(Jotabé)

Se extrañó por mi súbito regreso

pero volví para dejarle un beso.

Por cuanto es la manera permanente

para que el entusiasmo no se ausente.

Y sus labios sean como una fuente

donde mi boca beba diariamente.

Así en el persistente pugilato

Me acordaré de ese momento grato.

A lo mejor me absorbe el embeleso

y al pensarla dichosa y…

Ya se ha quedado …

GRAN VERDAD

Glosa (*)

 …

SIN DARTE CUENTA 

No vivas sin tu…

   La magia de un encuentro

Al encontrar tu voz y escucharla

en lejanía,

una luz radiante veloz me

abraza,

mi pesado camino aligerado

se vuelve

y mi angustia, a cada paso

atrás se va quedando,

con la esperanza de pronto

poder verte. 

Como una lluvia de estrellas

tus palabras me deposita

el viento,

las que a mi mustia vida

le dan alegría, color y lozanía.

Fue la…

LÁGRIMAS

…Lloré, bien mío, porque mi corazón estaba triste de ausencia.

…Cerré los ojos, bien mío, y te reconocí entre la multitud.

…Quise, bien mío, tener alas para volar contigo en la inmensidad de nuestro cielo sin fronteras y miríadas de aves me elevaron hasta el éter…

Entre letras me perdiera

Si a mi ciudad yo volviera…

UBICUIDAD

Puedo estar en tu orilla, bien mío, sin abandonar mi covacha de ermitaño que tú has visitado en alas del pájaro del sueño, ágil y fuerte.

. Tú puedes estar en mi covacha, bien mío, sin abandonar tu orilla de suelo asfaltado y sin exponerte a los latigazos del las embravecidas olas.…