ESPERANZADORA NOCHEBUENA
Por la situación tan complicada que la Pandemia nos hace vivir, conversé telefónicamente con Teresa, quien me decía que lamentaba no venir a visitarme por el temor al Ómicron, una variante del SARS-CoV-2, que está aceleradamente proliferando y enfermando a muchas personas, en su ciudad. Pero---me siguió diciendo---, como a ti te gusta leer, me puse a escribir lo siguiente y dedicártelo, querida amiga.
- “Es maravilloso y esperanzador, encontrar un nido en cada grafema, porque florecerá a los vientos de la mano de las brisas y responderá a las ausencias y a los olvidos y quizá los silencios, ya no puedan gritar su dolor. Cuando no se puede decir frente a frente, el sentimiento que invade el corazón, cada grafema se une para formar una flor y perfumando nuestras emociones, llegar a su lado en forma de un bello ramo de claveles y orquídeas, que serán reflejadas en el espejo de su sentir, si así lo quiere el Destino”.
Teresita---le dije---lo que has escrito, me ha conmovido mucho y me ha hecho meditar en el poder de la palabra.
- Gracias amiga, porque te ha gustado mi sentir, pero, por favor, escúchame lo que seguí escribiendo, en esta fecha en que uno se vuelve muy nostálgica y medita en el valor de la vida espiritual.
Ella prosiguió leyendo su sentir navideño, que para mí fue una grata sorpresa:
- “Llegamos a un final del año, ---prosiguió---, deseando que lo malo habido, fugue veloz como las horas que se están yendo, pero anhelamos todos que llegue un primaveral año nuevo, con mejores emociones, con augurios celestiales que ya palpitaremos cuando en la Nochebuena, sintamos la dulce sonrisa del Niño Divino, que evocando al Hacedor del Universo, el destello cósmico nos dirá: “¡Aleluya!...¡Aleluya!....Ha nacido el Mesías del Mundo, trayéndonos Paz y Amor. Vibraremos entonces, tomados de la mano en simbólica unión, todos los seres que cultivamos la bondad y la fe en nuestros corazones”.
Concluída su lectura y conmovida por lo albo de su sentir, emocionada solo me atreví a decir:
- Teresita querida, amiga de tantos años, es cierto que estás lejos, pero nos tenemos siempre presentes. Anhelo que Nuestro Divino Niño te traiga Salud, Paz y Bienestar…¡¡¡Llegó la Navidad….Se renueva la Humanidad!!!. Bendiciones para ti y tus seres queridos. Recibe mi fraterno abrazo navideño. Hasta pronto.
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IRIS GIRÓN RIVEROS
LIMA – PERÚ.
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