La Diosa de Mis Sueños

[JUAN EDUARDO ANDUJAR]

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La diosa  de mis sueños

Una tarde tranquila con la luna en cielo

vi destellos dorado  de un sol muy deslumbrante,

que un atardecer mirando hacia delante

le decía al universo.

“En medio del crepúsculo la luna deslumbrante,

llenara con su luz las aguas cristalinas

de un lago majestuoso en un cielo brillante,

iluminando  todo

 bajo la luz bendita de este cielo dorado.

Acariciando al mundo

rompiendo  el silencio en un cielo estrellado.” 

                                               

No paso mucho tiempo de aquella profecía

cuando un hermoso Cisne

en un atardecer con la luna en el cielo,

paseaba muy sereno sobre un hermoso lago,

estando inocente de  aquella profecía.

           

 Era un  Cisne  hermoso

con un  plumaje blanco, bello y esplendoroso,

que se movía en las aguas

con su andar majestuoso.

                  

Un  entorno tranquilo,

que rompía su quietud al paso de la brisa,

donde de vez en cuando 

alrededor del majestuoso Cisne

se formaban pequeños remolinos

en las aguas tranquilas de aquel hermoso lago,

rompiendo la quietud de aquel bello momento. 

                              

Es así como entonces

en ese andar  tranquilo del Cisne por el lago,  

ocurrió un evento  que fue maravilloso.

Aquel  hermoso Cisne tendió su alas al viento,

y la brisa sonara soplando dulcemente

se deslizo en sus alas  tendiéndolas al viento,

deslizando su cuerpo

en las aguas tranquilas de aquel hermoso lago

con la magia infinita de aquel bello momento.

                      

Muy cerca de la orilla de aquel hermoso lago

se podía vislumbrar un bello mirador

 formado por ladrillos.

Un arco muy  hermoso  para mirar al lago

con un pequeño banco que llegaba a la orilla,

donde  de vez en cuando iban los soñadores 

a sentarse tranquilos

mirando ese portento,

mojándose los pies allí en las orillas.

Pues ese hermoso banco,

indicaba el camino que llegaba hasta el lago,

rodeado desde siempre por un follaje hermoso

con rosas muy hermosas que crecía por doquier,

y un árbol muy frondoso  pegadito de el

rodeado de mil rosas justamente en la esquina.

Esa tarde tranquila  estando  muy serena

en aquel mirador viendo a la lejanía,

se encontraba  una diosa  en ese bello banco

sentada muy tranquila atrapando los sueños.

Mirando relajada  a un  Cisnes muy hermoso,

que nadaba tranquilo muy cerca de la orilla.

Ya con sus pies descalzos,

fue extendiendo sus  manos tal vez al universo

llamando al bello Cisne con un cántico hermoso…

Su cabello amarillo con bucles majestuosos

caía sobre sus hombros  flotando en el viento,

estando protegido por un bello sombrero,

blanco como la luna con una cinta rosa.

Crepúsculo sereno en esa tarde hermosa

que trajo de la nada vestida como un ángel,

 a esa hada tan hermosa con su luz deslumbrante.

Dejando al descubierto su hermosura de diosa

la mujer más hermosa que habita en mis sueños.

                                  

Y en la serenidad tranquila de aquel bello momento

la melodía hermosa de la brisa sonora 

rozó  muy dulcemente el traje de la diosa,

dejando al descubierto sus piernas majestuosas

bellas y muy radiantes

como la luna hermosa allá en el firmamento.

Y en ese atardecer 

estando muy  tranquila brillando cuan lucero

aquella hermosa diosa

susurro suavemente con su voz melodiosa,

llenándose de luz su radiante  sonrisa.

“¡Oh Cisne majestuoso…acércate a mi alma…!

ilumina mis manos con tu bello plumaje

deja pues que tu ser fluya  su amor en mi

para volar al cielo grabando mi sonrisa

más allá  de nubes,

estrella tras estrellas en busca de mis sueños."

Y el Cisne majestuoso se acercó hasta la diosa,

y con su cuello erguido navegando muy lento

rozo muy dulcemente la punta de sus dedos,

haciendo pues entonces que un rayo de la  luna

abrazado a la luz  de aquel bello crepúsculo,

iluminara el lago más allá de los  tiempos

rompiendo el silencio,

acariciando al mundo  con la luz del amor.

 Mi corazón se funde esa tarde callada

bañado por la  luz del crepúsculo hermoso,

rodeado por la luna creciente como un todo. 

                          

[Iris Girón Riveros]

Muchas gracias

Juan Eduardo

por tan bella rosa azul.

[Iris Girón Riveros]

Te agradezco mucho Juan Eduardo,

y aprovecho para felicitarte por tu lindo poema.

[JUAN EDUARDO ANDUJAR]

Gracias amiga

[JUAN EDUARDO ANDUJAR]

Gracias poeta Magnolia por  pasar por mis letras...