En lo alto se abren compuertas invisibles
y un torrente de cristalinas
aguas se precipita al vacío, majestuosa,
besando la falda de la montaña.
Aturde un estruendo que por momentos
es solo el retumbo de una ola lejana
de un inexistente mar.
Se extasían los ojos ante la cortina líquida
que termina convirtiéndose
en ondulada cabellera
de una diosa imperturbable
ante la visión del infinito.
Millones de gotas, cual pequeñas lupas
reflejan la luz del sol -implacable
y severo guardián del paisaje-
e inesperadamente, se confabulan
en ofrendar un arco iris impactante,
digno complemento del paisaje de ensueño.
Delia Pilar Checa – D. A. R.
Mendoza, Argentina - 2020
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Delia...
Hermoso nombre dado a esta inspiración.
Definitivamente, el Salto Ángel es una "Cascada Angelical"
Saludos
¡Muchas gracias, Iris!
Saludos.
Delia
Con tanta agua desbordando hasta se antoja una paseadita.
¡Así es, José Antonio!
Gracias por tu lectura.
Delia
Grato leerte, deleité tus versos.
Abrazotes poetisa sentimental
Muchas gracias, amigo.
Retribuyo tu abrazote.
Precioso mi Delia bella
Muchas gracias, Edith.
Un placer tu comentario.
Sublime poema, de singular belleza.
Muy agradecida, Milagros,
por tu comentario.
No podían faltar tus maravillosas letras querida Delia!
Realmente FORMIDABLES!!
Se extasían los ojos ante la cortina líquida
que termina convirtiéndose
en ondulada cabellera
de una diosa imperturbable
ante la visión del infinito.
Mis gracias de siempre
Felicitaciones!!
¡Miles de gracias, Beatriz!
Me llena de gozo tu comentario.
Un abrazo.
Delia
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
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