DE QUÉ HAN SERVIDO TANTOS AMORES

[Carmen Amaralis Vega Olivencia]

DE QUÉ HAN SERVIDO TANTOS AMORES

De qué han servido tantos amores. A lo largo de la vida muchos amores, tantos amores amordazados en el alma. Callando ilusiones insensibles, dolores y alegrías inertes en el tiempo.

De que sirvió aquel susto en el alma cuando veía aquellos ojos azules mirarme interesados en mi tímido rostro, si un día cualquiera esos mismos ojos se rieron de mis osadías de niña enamorada.
De que me sirvió aquel amorío en la esquina de mi cuadra de ilusiones. Aquel susto en el sistema nervioso a escondidas de la autoridad paternal en anocheceres de fuerza interior para ocultar lo que más se parecía al amor. No me fue posible seguir el instinto de vida, me esperaban los libros universitarios y no aquel primer beso que nubló mis instintos materiales.

De qué me sirvieron las miradas y los boleros apretando mi cuerpo sobre otros cuerpos deseosos, las carcajadas bajo la luna envuelta en las delicias de la piel frente a un mar que bramaba de suspiros carnales contenidos para que no llorara la Virgen, siempre presente esa Virgen que me ha protegido siempre.

Y llegaron las distancias, amores extranjeros. Aquel turco que me prometía hacerme reina de un palacio de mármol blanco por allá por Estambul. Los amores de aquel rubio gringo que me deseaba como trofeo mientras recorría los pasillos de la sabiduría. De aquel italiano al que le enseñaba a pronunciar: ti amo tanti.

Si, de qué me han servido tantos amores ilusos, débiles, insufribles, inservibles, inútiles, malgastando la vida sin que llegara lo que soñaba en las noches desvelada dándole forma al romance, la ilusión verdadera, el calor con manos sudorosas deseando la caricia perfecta, el amor intenso, sacrificado, genuino, que supiera elevarme al cielo de mis sueños.

He tenido de todo en la vida, de todo y mucho, sobre todo amores inservibles, inútiles, sosos, tibios, pero nunca con el fuego de volcanes incendiados con el ardor del verdadero amor.
Ilusa de mí, aún sigo esperándolo.

[Delia Pilar]

Muy logrado relato, Amaralis. 

Quizás tuviste lo que otras almas añoraban, amiga,

sin poder lograrlo a pesar de muchos esfuerzos inútiles.

Fue muy placentero leerte.

[Silvana Beatriz Sosa]

Carmen: 

Excelente crónica has realizado. Has contado tu experiencia y es muy valiosa. Excelente relato. Me gustó mucho cómo lo desarrollaste. Lo importante es que todavía tienes la esperanza de seguir buscando a ese amor real, el verdadero amor