MARISA

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

M  a  r   i   s  a

MARISA

 

                                         Toda la noche estuve extrañándola. Teresa se había ido intempestivamente anoche, apenas después de habernos hecho el amor. No sé muy bien qué pasó. Si fueron los tragos, las pastillas, la mariguana o alguna cosa que yo hice o dejé de hacer. ¿Dije alguna cosa impropia? No lo creo. No recuerdo nada extraordinario por más que he estado intentando recordar.

                        La cruda es inmensa. Como nunca me había sucedido. Recuerdo crudas anteriores, incluso las más terribles, las primeras, y ni esas se parecen a lo que ahora me acontece. Esto es terrible realmente.

                       Ya lo sé. Todo se ha juntado. El amor, el desamor, la ausencia pero sobre todo la inestabilidad emocional que me provoca desconocer qué ocurrió o qué pasó con Teresa. He intentado llamarla pero no contesta su celular, ni me responde a ningún WhatsApp que le envío.

                       Recuerdo bien cómo empezó nuestra relación, hace ya de ello largos siete años. Teresa trabajaba en el telégrafo y yo fui a poner un telegrama a mis parientes en el Bajío. Tenía yo fácilmente veinte años de no tener contacto con ellos, desde fines de siglo, cuando me alejé de mis padres para independizarme porque era insostenible que no entendieran que yo no deseaba casarme “como lo hacen todas las niñas de bien”, porque yo había descubierto mi “secreto” recientemente. Mi lesbiandad era hermana gemela de mi liviandad, lo supe luego de haberlo sospechado muchas veces.

                       En cuanto la vi, me gustó y noté en su mirada que yo también le había gustado. Ese mismo día salimos por vez primera. Antes de los ocho días ya vivíamos juntas.

                      Pero ahora estoy sola, abandonada, descontrolada y a punto de buscar una salida falsa.

Del libro inédito de cuentos: LA REGLA DE ORO.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

Querida María Beatriz; ¡Mil gracias y excelente sábado familiar; festejo tu comentario, me gustó! 

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Muchas gracias querida Delia Pilar, por tu lectura, comentarios y destacado; muy felices sábado y fin de semana familiares!

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

Pero cómo habrá sido que no se acuerda lo que dijo o hizo  ja ja

Allá a los estragos del licor le dicen la cruda no?  Me di cuenta a medida que iba leyendo.

Original relato mi querido Benja, no te había leído nunca nada parecido, menos cuando leí marihuana  jaja

Te salió GENIAL!!

Felicitaciones por el Destacado bien merecido!!

[Delia Pilar]

Muy buen relato, Benja. Original y bien escrito, relación frecuente en las épocas actuales o,

por lo menos, más visible. Fue un placer leerlo. 

¡Felicitaciones!