VALENTÍN, EL SANTO DEL AMOR
Valentin eras la pureza del secreto
un violín con cuerdas de viento
y armonía de silencio ...un cuerpo magnético
donde giran las agujas del delirio
una dulzura de fuente cuyo manantial semejaba un
destello de encanto perfumado una canción
de cuna que arrulla los corales de los mares
un confín de numerosos horizontes temporales
donde brota el sueño y la locura del amor.
Claudio II y sus perversos mandatos
no pararon tus dones y a ese decreto de !!
no amor!! opusiste una ola de luz dotada
de auroras nacarinas... una flor llameante
de soles y plegarias
y en tu delirio de lumbres de caracoles
en ese reflejo de escamas
plateadas casaste en secreto a los jóvenes
enamorados obligados a la guerra.
Un resplandor de corrientes
un cofre de tesoros fulgurantes
un suspiro de sirena que corteja.
El grácil gesto de los peces o de una luna semi dormida
pudieron más que lo prohibido.
El emperador no supo que fue burlado.
El amor triunfó.
Una dulzura de fuente cuyo manantial es un
encanto perfumado o una canción
de cuna que arrulla los corales de los mares.
Allí tu obra, santo del amor
y numerosos horizontes temporales
se abrieron a la vida nueva
la nueva familia que empollaba
esa que sólo alumbraba la voluntad de Dios.
Vilma Lilia Osella
Ciudad de Buenos Aires
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