Un oasis nacerá

[Aimee Granado]

  

Tus zafiros encerrados con cerrojos 

liberemos del osado desconcierto, 

de azaleas vestiremos el desierto 

y un oasis nacerá sin más abrojos. 

  

Los geranios brillarán entre sonrojos 

y con orlas de azucenas nuestro injerto,  

dará rienda de emoción sin desacierto 

porque un sueño ha trascendido sus herrojos. 

  

En el arca del amor vive el desvelo 

y el sublime surtidor de la ambrosía 

que hermetizan los idilios imborrables. 

  

Y no hay rejas ni entresijo en este anhelo 

que detenga a la sublime poesía, 

ni al elixir de unos sueños inefables. 

  

Aimée Granado Oreña © 

[Aimee Granado]

Gracias amigo José Antonio por tu gentileza y cordialidad.

[José Antonio Sifuentes Jaimes]

Tus zafiros encerrados con cerrojos 

liberemos del osado desconcierto, 

de azaleas vestiremos el desierto 

y un oasis nacerá sin más abrojos.

Es una muy bella empresa, suerte y que la puedas llevar a cabo.

[Aimee Granado]

Bety, agradezco tanto tus comentarios siempre llenos de luz para inspirarnos en este camino donde la poesía nos une y nos alimenta el alma.

[Aimee Granado]

Hola Lucía.

Muchas gracias por tu gentil comentario y por tu presencia entre mis versos.

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

Y no hay rejas ni entresijo en este anhelo 

que detenga a la sublime poesía, 

ni al elixir de unos sueños inefables. 

  

¡Muy cierto mi querida Aimeé!  Así como la VERDAD tarde o temprano se impone, abriéndose camino entre muchos recursos de falsías;  el AMOR siempre amiga mía,  se abrirá paso entre desasosiegos, malestares, acaso resentimientos con sus secuelas de rencores y odios.

Un mundo nuevo clamamos, tan igual a cómo se clama por un OASIS  si estuviéramos en un desierto; y, en cierta forma estamos en un desierto, con un  simún maloliente y candente (guerras,  violaciones, maldades) sacudiéndonos,  sepultándonos,  casi muertos de fe y esperanza.

Grandioso compartir querida mía!

Felicitaciones!!