RENACER

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

RENACER

 

Primavera que  besas mi semblante

y en otoñal arroyo de cristales

llegas a florecer mis graminales

abriendo hojas en flor

¡Es tan hermoso y cálido tu beso!

Que entre ilusiones se alzan mustias rosas

añorando el carmín de mariposas

que ayer dieron color

 

Ya solitario huerto resignado

a dormir preparaba sementera

mas, silente inconforme enredadera

alzaba su fervor

Y enhestaba  zarcillos escondidos

guardando la esperanza de un milagro

para que de su hondura salga onagro

exigiendo calor

 

Se desplazaba sombra en toga gris

y en horizonte,  culmen de magruras

¡Con polvos expectantes de amarguras!

Muerto estaba en amor

Y hoy cintilan estrellas en mis noches

¡Hoy la emoción suprema inusitada!

De viuda nuevamente enamorada

¡Es un haz de esplendor!

 

Esos nocturnos antes amorrados

a bullicio de flores charlatanas

¡Amapolas, orquídeas, campanas!

Son manto cobertor

¡Y es que llegaste tú,  con aquél beso!

Resucitando...   ¡Tanto mis vertientes!

Que fuiste entre mis milpas penitentes

¡Un santo redentor!

 

 Beatriz Vicentelo

Derechos Reservados

 

Zarcillos :  Ganchitos o  ventosas que tienen las enredaderas

Onagro: Arma de asedio,  tipo catapultas

Culmen:  Culminado

Milpa: Porción de tierra para cultivo

[Ernesto Kahan]

Un poema superior que emociona mucho con una lírica es admirable.

Gracias amiga Beatriz Vicentelo

[Levy Ronny Benlabrat]

Una de las situaciones que enfrenta el adulto mayor con más frecuencia a medida que pasan los años es enviudar. La muerte fue, es y será siempre un gran misterio más allá de las creencias y la fe. Lo desconocido trae consigo temor e incomodidad y para los viudos resulta doloroso vivir en una sociedad que no visibiliza su condición y dolor.
Se trata de un evento doloroso en la vida del cónyuge que pierde a su pareja, PERO ESTO NO ES EL FIN,  debe haber una nueva primavera, hay que dar una nueva oportunidad a la vida, renacer de los escombros y la tristeza sin jamás negar a seguir viviendo en paz y armonía, como se dice: “El muerto al hoyo y el vivo al bollo”. Disfrutar la vida a pesar del dolor es un remedio vital, es como dices “un renacer”, darse el permiso de seguir viviendo...¡qué más natural que vivir sonriendo, besando, enamorando!
¡Qué optimismo el tuyo, qué valentía! lo dices tan bien en estos maravillosos versos que parecen ser una excelente lección a todos aquellos que siguen viviendo en ansiedad y angustia.
Una fina armonía poética en toda su idealización romántica, siempre mi admiración y comunión con tus nobles sentimientos.

Ronny