¿Qué hacer?

[Ronald Bonilla Carvajal]

INICIO EL COMPARTIR DE LA IV PARTE de mi libro inédito HERIDA DE AGUA, denominada

APUNTES PARA UNA HISTORIA

 

 

 

 

XVIII

¿QUÉ HACER?

A propósito del libro de V. I. Lenin (quizás no)

 

Alguien preguntó qué hacer

pero yo no voy a dictar las pautas;

esperaré a la sombra del almendro en flor

que bajen los poemas

como mayos predispuestos a la lluvia.

 

Preguntó y quiso contestar

en su vieja sabiduría de viejo zorro

pero yo no dictaré las reglas

ni al canon lo pondré sobre el tapete,

solo esperaré sentado

en la mecedora mullida del silencio

a que viajen las briznas indolentes

que el viento empuja

para asegurar que sigue latiendo

una lenta tarde

en que nacieron las lianas para inventar el ocaso.

 

¿Qué hacer? – dijo en un libro

que fue olvidado

en mis cuadernos de estudiante,

¿qué hacer? – y se miraba las manos

como preguntando al tiempo

que no viajaba en las aguas del Mar Negro.

 

Pero yo me sentaré a la vera del paisaje,

esperaré a que vengas musitando la trova

de un muchacho tan nuestro

como el cauce del río que buscó sus peces

infructuoso.

 

Esperaré a que revienten los versos

que ya estaban escritos antes de soñarlos,

como cuando sueña el pueblo

que tendrá un mañana para partir el pan

con equidad.

Autor de la ilustración Agim Sulaj

[Liliana MarIza Gonzalez]

Felicitaciones RONALD

Gracias 

mary

[Ronald Bonilla Carvajal]

Gracias, Vilma, un fuerte abrazo.

[Vilma Lilia Osella]

Ronald, un gusto leer estos versos sublimes. Felicitaciones!!

Vilma Lilia

[Ronald Bonilla Carvajal]

Gracias, CArlos Fidel, por los versos que reproduces y por dejr tu opinión, abrazos

Gracias Mary, por el superlativo, abrazos

Gracias Beatriz, así es, aprecio tu lectura y comentario, abrazos

GRacias, Hugo, por dejar tu valiosa huella ante estos versos, abrazos

[Hugo Mario Bertoldi Illesca]

Agradezco compartir, Ronald, querido Amigo, este fruto de tu inspiración, mismo que, como tantos, nos invita al sano ejercicio de la reflexión acerca de actitudes, impulsos, deseos, y todo tipo de cuestiones humanas. 

[BEATRIZ OJEDA]

Esperaré a que revienten los versos

que ya estaban escritos antes de soñarlos,

como cuando sueña el pueblo

que tendrá un mañana para partir el pan

con equidad.

Excelente. No hay que escribir por escribir. Todo está dentro de uno y aflora cuando menos lo esperamos

Hermoso poema amigo Ronald

[Liliana MarIza Gonzalez]

Pero yo me sentaré a la vera del paisaje,

esperaré a que vengas musitando la trova

de un muchacho tan nuestro

como el cauce del río que buscó sus peces

infructuoso.

Bellisimooo!

Gracias 

mary

[CARLOS FIDEL BORJAS DIAZ]

Preguntó y quiso contestar

en su vieja sabiduría de viejo zorro

pero yo no dictaré las reglas

ni al canon lo pondré sobre el tapete,

solo esperaré sentado

en la mecedora mullida del silencio

a que viajen las briznas indolentes

que el viento empuja

para asegurar que sigue latiendo

una lenta tarde

en que nacieron las lianas para inventar el ocaso.   Reflexivo

[Ronald Bonilla Carvajal]

Gracias, Delia, por el destacado y por el interesante comentario, abrazos

Gracias Aimé, no solo por destacar mi obra sino por el comenartario que arroja luces sobre las vivencias y pensamibntos que intento plasmar, abrazos

[Aimee Granado]

Pero yo me sentaré a la vera del paisaje,

esperaré a que vengas musitando la trova

de un muchacho tan nuestro

como el cauce del río que buscó sus peces

infructuoso.

 

Esperaré a que revienten los versos

que ya estaban escritos antes de soñarlos,

como cuando sueña el pueblo

que tendrá un mañana para partir el pan

con equidad.

Nos obsequias las bondades de tu ser entre letras maravillosas, llenas de esa genuinidad que te hace tan original y profundo. Y nos haces revisar aspectos que quedaron retrasados en el tiempo, esas contradicciones que son la fuerza motriz del desarrollo y la libertad de crítica abordada frente al dogmatismo.

Gracias por hacer que eclosionen en versos las vivencias que te marcan con sus abrazos.

Cada letra de tu libro es un regalo que llega con las caricias de esas musas nunca olvidadas y que se escapan entre tus anhelos y esperanzas.

Un gusto como siempre tenerte entre nosotros.