NADIE COMO TÚ

[Ingrid Zetterberg]

NADIE COMO TÚ

¿Dónde estás mi pequeño niño

que arrullarte quisiera

y hacerte dormir

en mi regazo silencioso?

Deslizar mis besos

sobre tu frente de alabastro

mientras los ángeles

entonan un triste canto,

bajo el árbol de cerezos.

¿Dónde estás amado hermano?

Joya arrancada al viento,

consolación que viaja desde tu voz

hasta mis brazos.

Eres tú mi medicina

cuando el llanto se hace amargo.

Nadie como tú

para acariciar mis miedos,

para prepararme refugio

entre los pliegues de tu cuello.

Y de pronto la sanidad

en mi alma descansa,

porque tú y yo somos uno, mi niño,

de aquí hasta la esperanza

de nuestro albo encuentro

en la eternidad.

De mi poemario

"Joyas de mi alma"

Derechos reservados

Safe Creative Cta. 1006080193112

[Ingrid Zetterberg]

Gracias querida Beatriz por visitar mis versos y dejarme tan bella respuesta y tan lindo Destacado. Un abrazo grande.

[Ingrid Zetterberg]

Gracias querido Benjamín por asomarte a mis versos y dejarme tan grato comentario. Un fraternal saludo.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Muy bello poema maternal, fraternal y filial, querida Ingrid!

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

Y de pronto la sanidad

en mi alma descansa,

porque tú y yo somos uno, mi niño,

de aquí hasta la esperanza

de nuestro albo encuentro

en la eternidad.

¡Ay qué hermoso final mi querida Ingrid!

Palabras sublimes para un hermano que se fue;  para un hermano con quien hemos compartido tanto!

Bellísimo poema que cala en el alma!

Miles de gracias

Besos