JUNIO

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

JUNIO

J  u  n  i  o

 

Apenas es junio y ya siento la emoción

correr, circular por mis venas;

no he llegado a la fecha de mi cumpleaños

y requiero más amor que nunca antes

porque he necesitado de tu compañía

de tu presencia ahora descolorida y tibia

como una mañana de invierno sin darte

tiempo de nada y eso me afecta en

demasía, aunque tú no lo creas.

 

No obstante, bien sabes que te amo

y no es cosa de viejos o tardíos

adolescentes caer en estas suspicacias.

 

Preparado estoy para cualquier cosa.

Podría morir al rato o mañana y estoy

listo para que llegue el final sin caer

en dramatismos obsoletos o temas de

telenovela o radio dramas de pasquín.

 

Creo que a la vida nada le debo,

al mundo en cambio sí le estoy

endeudado porque tuve muchos

planes que han quedado incompletos

y no hay vida que alcance por más

que la queramos estirar como chicle.

 

Pero ni hablar, el tiempo es el tiempo

y no hay plazo que no se cumpla ni

fatalidad que no te llegue; pero perder

la vida, bien lo sé, no es desgracia

sino una ocasión de luz y una cita

con Él postergada desde que nací.

 

UNO

Viví como pude, tomé lo que tocaba,

lo que me correspondía me bastó

y doy gracias al cielo por ser quién

soy, y no otra persona, pude ser un

maleante, un enfermo mental, un loco,

un maniático, y aunque un poco de

todos los que he mencionado tengo

no puedo aseverar que caigo en lodo.

 

Miasmas hay en mis orígenes como a

todos los seres humanos nos ha

correspondido. Pero vivir por setenta

y unos años es una gracia que se me

concede sin yo saber por qué razón

o que misión debo cumplir aún...

 

DOS

Algún día, sabré, de eso estoy seguro

cuál es esa misión hasta hoy oculta

por la Voluntad Arcana, pero no lo

sabré hasta que me corresponda…

 

TRES

Supongo que mis ancestros están,

no sé muy bien cómo, ni por qué,

pendientes de mi futuro inmediato.

Solo estoy seguro que pendientes

se encuentran, lo intuyo, sin más

detalles que se me hayan ofrendado.

 

CUATRO

Muy cierto estoy de que nada temo

porque nada debo, no al menos que

se encuentre a mi alcance; pudiera

suceder que algún asunto pendiente

lo haya olvidado, pero por algo ha ido

al cesto del no-me-acuerdo, no es

pues casual, sino hay un puente de

ser en ese no ser para que ocurra…

 

CINCO

Mis hijos y mis nietos, los cinco,

tienen el futuro en sus manos, les

pido que memoricen en sus corazones

que termino sin saber lo que es odio o

rencor alguno; toda afrenta si la hubo

ha quedado olvidada y se trata de irse

sin ninguna desgarradura no solo por

que eso es lo ético, lo conveniente,

sino además porque si hemos de

presentarnos ante el Eterno con

alguna mancha, no tendremos de

modo inmediato manera de gozar

la eternidad que con su Pascua

nos fue concedida a todos, sin

excepción ninguna, a todos…

[Liliana MarIza Gonzalez]

Excelente

mary

[Amalia]

La amistad es un tesoro que no todos pueden tener, pues con tu amistad yo soy rica.