Estancado

[marco gonzalez]

Las cenizas de los años,

se apoderaron del silencio

de mi cuerpo

y platearon mi veterana existencia.

Un sol sin luz me venda los ojos

y no puedo ver las grietas de mi

vencida fortaleza.

Una extinta compañera,

desde el cielo me habla con el alma

mientras que la mía desolada,

con amor le contesta.

Voy escondiendo mis amargas penas,

entre las llamas tristes de mis letras,

mientras mi infecunda alma,

va descifrando silencios.

Mis castigos son eternos desiertos

y siento como se me ha detenido la vida,

junto a orilla,

de su perfumado cuerpo.