ESCALOFRÍO

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

ESCALOFRÍO

Escalofrío

Es esa la nube donde se perdieron mis diosas

            ese el escalofrío que le partió el dorso.

La Tierra se agitaba en sus adentros y

            los niños corrían desmañanados hacia la escuela.

            El sol: un rescoldo tras el incendio.

CINDY HATCH, México, 1997.

Escalofriante desenlace

luego de tantas veces

opacarse,

vimos al sol brillar

como en incendio,

pero todos nos convertimos

en rescoldo 

del pasado inmediato.

Inocentes niños

de azoradas caras,

de rostros impávidos,

de ceños fruncidos,

fueron escenario

de una innegable revuelta

que será inolvidable 

por todas sus consecuencias.

Todos dijimos

"no es posible

que nos sucedan

estas cosas 

que no propiciamos";

pero en el trasfondo

de todos los hechos

sí, fuimos culpables

y lo propiciamos todo.

Fuimos los autores,

así haya sido

de modo inconsciente;

pero toda inconsistencia

se paga con creces;

así lo vivimos

y así lo asumimos

no fuimos,

ni somos,

nunca inocentes.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Muchas gracias amigo Críspulo Rufino; feliz lunes vespertino/nocturno, buen descanso y luminoso martes para todos!

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Gracias querida Mamihega; muy feliz lunes para todos!

[Maria Mamihega]

Muy bueno! siempre es muy lindo leerte.