EL COLOR DEL AMOR

[Levy Ronny Benlabrat]

EL COLOR DEL AMOR

 

El amor es un suave destello inasequible empañado en versos de suspiros y brazos de cielos, todo un universo de sendas y paisajes sublimado por la musa del alma, es el sentimiento donde la vida nace y procrea, es la memoria poderosa del pulso de la vida, un trocito de espacio que ilumina la divinidad vigorizante del deseo y sus promesas insondables, es el pan y el vino de festejos venturosos, un mandato sensual, una alucinación que se apodera de la fantasía donde la mente se extravía contemplando a la belleza.
El amor es una joya de oro fino, es  una virtud desplegada en el lago espumante del alma, el vuelo de un astro en sus luces carnales, es un sentimiento de alba encendida, una fiebre ensortijada de latidos de mariposas, es el suave beso del viento que nunca pide ni exige, sólo aclama, pregunta y despierta, llora y admira, juega a veces a ser un dios en un ejercicio que adivina y un dinamismo que imanta.
El amor es un espiral de juguetes, de espejos y dilemas, siempre necesita la droga loca del deseo y el milagro de un beso, es la confesión del alma incontrolada, un romance de delirio insaciable, una plenitud que suspira y magnetiza entre tatuajes y quimeras.
El amor es un gesto de encuentro y despedida, un signo de presencia, una expansión sosegada de dulzura infinita, un estallido divino, es un eco de comunión y esperanza, un sublime perfume voluptuoso que se consume en un valiente nido, una evocación de magia y orgullo, es la amistad del alma, el origen compatible de toda unión, es la antorcha de la razón, el puro proceso de un acto de incursiones entre la carne y la sangre, el reino culto y majestuoso de toda fuerza creadora.
El amor nace con las cuerdas vocales de todos los sonidos, es el icono del Salvador, un eros con su arco, un pródigo ángel que vuela entre auroras hechiceras, es un pañuelo azul que revoltea como una alondra en el fresco esmalte de los jazmines, es el destello de una ninfa entre fragancias de violetas y espumas de mares.
El amor es un trino que suena de improviso, es un suave soplo de divinas corrientes encarnado en inmortales anhelos, es un canto iluminado de gloria y gracia, bautizado del estupor de la lluvia  y su agua bendita, es un mito de verdad, un sello de flotante cariño, una verdad vestida de luces e ideales, un horizonte que se hunde en un mar lustroso, una luz de primavera circundada de besos delirantes y caricias de terciopelo.
El amor es un calor níveo y luminoso, es la memoria de los pasos encontrados en los senderos del paraíso, algo que se evade en los sueños y se delata en madrugada entre estrellas y reflejos, es un escape al encuentro del ardiente y trémulo silbo de los labios,  un regreso al éxtasis despierto de toda revelación, es una sombra tangible arropada de seda celeste, una paloma que despliega sus alas y arranca al vuelo hacia el alma de los astros, una plegaria divina que resplandece al ritmo del latido mágico de los cielos.
El amor es la gloria del abono y la resina, un sabor que se consume con el ritmo del hechizo, va y viene, nace y renace, escoge la manzana y  encuentra su paraíso, se oculta entre las grietas de la luna y los fondos de su túnel, aparece como el brote de las celestes torrentes. El amor es un interminable diluvio de lucha y danza, es el mandamiento del vino que se derrama en un concierto de luceros e insomnio con el ritmo de la sangre, es el dominio de un espacio espumoso desatado en pasiones.
El amor es una torre de arena, es el corazón del silencio y la campana sedienta del viento, el antiguo aroma de una primavera soñada, el dios del júbilo en campos de recreos inventados, es el vidrio fundido del universo, sacia su sed con las lágrimas del ángel, siempre conserva el olor de los bosques y la melodía de la madrugada, rebautiza las tibias riquezas del alma, lava el pecado, se torna en un diamante de infancia e inocencia, rechaza la venganza, anula la derrota, habla y recrea un nuevo idioma, llena la vida de nuevas estrellas, pregona un destino sin mentira y sin ego, se colma de luces y espejos, de coronas y silencio, es de nuevo el regalo de un suave beso, una verde provincia de sol y luna, una lámpara de alba y poesía, un renovado sacramento de frescor y de gloria.

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[Iris Girón Riveros]

Es tan hermoso el amor, que en su gigantesco mencionar

ya todo se ilumina y lo dichoso e inmarcesible,  aparece.

No podría yo dimensionar con mis palabras, lo maravilloso

que es leerte y endulzar nuestra mente y nuestro numen,

con tan profundos pensamientos tuyos, que arrebatan nuestra admiración,

haciéndola más relente y cristalina en esta ocasión en que regalas

o compartes tan incomparables expresiones referidas al amor.

Y como espléndidamente lo dices,  el amor

"...es un suave soplo de divinas corrientes encarnado en inmortales anhelos, ..."

y es así, sutil, bendecido y divino, porque uno lo mentaliza

en que será eterno ese amor.

FELICITACIONES distinguido poeta Ronny.

[Teodora E. Leon Salmon]

Oh, cuánto se tendrá que decir del amor , sentimiento que nace de un encuentro entre dos personas atraidas por lo que uno encuentra en el otro. Amor que puede ser duradero o efimero.
Gracias por compartir tu basta inspiración hacia el amor, poeta.
Saludos cordiales
Teodora

[MARCELA ALEJANDRA VANMAK]

Te felicito Ronny, creo haberlo leido antes. Tu poema apabulla en esa cascada de acciones y dondes del amor. Me dejas sin aliento y sin palabras. Una oda al amor en toda su extension y belleza. Felicitaciones por tu capacidad descriptiva y tu imaginacion frondosa. Tu texto es para leerlo despacio e ir digiriendo cada concepto y sensacion. Felicitaciones!

[Delia Pilar]

El amor es una torre de arena, es el corazón del silencio y la campana sedienta del viento, el antiguo aroma de una primavera soñada, el dios del júbilo en campos de recreos inventados, es el vidrio fundido del universo, sacia su sed con las lágrimas del ángel, siempre conserva el olor de los bosques y la melodía de la madrugada, rebautiza las tibias riquezas del alma, lava el pecado, se torna en un diamante de infancia e inocencia, rechaza la venganza, anula la derrota, habla y recrea un nuevo idioma, llena la vida de nuevas estrellas, pregona un destino sin mentira y sin ego, se colma de luces y espejos, de coronas y silencio, es de nuevo el regalo de un suave beso, una verde provincia de sol y luna, una lámpara de alba y poesía, un renovado sacramento de frescor y de gloria.

Una maravillosa composición poética, Ronny, con unas metáforas tan bellas y bien logradas que no me canso de admirar (en fin, como todo lo que escribes y nos compartes generosamente) y ellas de conmoverme.  Sí, el amor plenamente realizado tiene estas características tan bien enunciadas por ti. El cierre es impactante pero te confieso que me costó elegir un párrafo porque todo su desarrollo es espectacular.

Gracias por esta joya literaria, felicitaciones y va mi aplauso -hasta que duelan las manos-, desde la distancia.

La imagen del fractal acompañante es ¡preciosa!

Delia

[Vilma Lilia Osella]

CUÁNTAS IMAGENES PARA EL AMOR, UNA CATARATA INTERMINABLE. GRACIAS, AMIGO RONNY. SIEMPRE ME INSPIRAS Y CONMUEVES.

VILMA LILIA

[Liliana MarIza Gonzalez]

El amor es un calor níveo y luminoso, es la memoria de los pasos encontrados en los senderos del paraíso, algo que se evade en los sueños y se delata en madrugada entre estrellas y reflejos, es un escape al encuentro del ardiente y trémulo silbo de los labios.
Excelentes definiciones del amor, metáforas magicas y una elocuencia extrema
Felicitaciones
mary

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Nítida prosa poética, Ronny!

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

¡Ah mi querido Ronny hermoso!

¡Que divina forma de ver al AMOR!  Uno lee tu concepto,  tus conceptos sobre ese bendecido sentimiento y queda radiante por el contagio de tu bellísimas descripción.  Descripción con sendas y deslumbrantes imágenes que nos trasladan a un mundo maravilloso!

Indiscutiblemente te eriges como el MONARCA EXCELENTÍSIMO DE LA METAFORA!  No creo hallar otro poeta, que trace con su fascinante pluma, imágenes tan pero tan bellos, al menos para mi,  que soy sumamente imaginativa y soñadora, me trasladas a los páramos del Nirvana.

El amor es una torre de arena, es el corazón del silencio y la campana sedienta del viento, el antiguo aroma de una primavera soñada, el dios del júbilo en campos de recreos inventados,

¡Precioso amigo querido!  Has hallado la forma prístina para conjugar adjetivos sumamente brillantes.  Desde luego que los guardo con asaz deslumbramiento!

Muchas, muchísimas gracias!

Aplausos prolongados exquisito poeta!