Noches de plata y calma...
me han tendido una celada traicionera.
Hechizado fui por ti, mujer... y engañado;
cazador que fue cazado por la luna.
Belleza de mujer, fuiste magia y emboscada
que mi ser han transformado.
Al amar a las divinas, yo he bebido
como un vino espirituoso, así embriagante
la condición femenina.
Yo el amante de todas las hermosas
en mujer voy a cambiarme,
como se torna el gusano
en mariposa de carne.
Así será, andado, el camino
cual río de largas edades. Camino de diamantes
de maldades, de sorpresas vagabundas...
de amores pasajeros y traiciones perdurables.
He sido un cisne que andrógino fingía
ser águila vencedora de la altura.
¿Era eso lo que había y esperaba
en el fondo abismal de cada alma?
¿Será este el secreto que se aguarda
al final de todos los destinos?
Noches de plata y calma
el hombre no es ser entero,
es la mitad de una luna
que es su pasión y desvelo.
Comentario
Es su pasión y desvelo
esa luna que le inspira,
es cual azarbe que invita
y asperge en su desafío
el versar que cual idilio
surca con rostro de anhelo.
EXCELENTE POEMA.
SALUDOS
Tiene un lado en las tinieblas... El hombre tiene a lo femenino en el subconciente, y lo proyecta sobre una mujer para enamorarse.... de su propio femenino ignorado!! Pero algun dia, en algun tiempo, en algun mundo, se cansa de este juego y quiere desacubrir la totalidad de su alma. De pronto la mujer está afuera y está adentro, y a las dos las ama con pasión irresistible.
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