DESDE LA MÁS ALTA TORRE
Subí a la cumbre de piedra, asombro vertical en la pradera
y quise ver el mundo.
*
Aire silencioso en la antigua atalaya,
espacio de aves sobre el océano de la tierra.
Colores, hombres y bestias,
puntos minúsculos en la vastedad del prado.
El viento sopla sobre la simetría imbatible
de la catedral del tiempo.
**
Encandilado,
puedo sentir la nostalgia del momento ido,
orgullo pasajero
ya sin abrigo.
*
Desde aquí la pradera es movimiento,
soy idea sin cuerpo,
admiración del otoño.
El follaje ya no está
ha caído a los pies de la mole
*
Es la voluntad en la alta torre
contra el invierno insinuado
en grises volutas.
*
La aguja en la cumbre
es dura espada que vuela
y nos hace evocar
el poderío perdido en largas distancias
Lluvia – viento
donde el hombre no es dueño
Solo contemplador.
*
Aquí estoy
el mundo mira mis manos vacías
mientras allá en el valle
estará por siempre el quehacer humano
con herramientas de moho
labriegos que no se cansan
*
Las construcciones que no hice
se levantarán en nuevas torres
campanarios de oración y cielo de tormenta.
*
De piedra se talla la vida
sin alterar el paso de las nubes
Dejé el humo en cada tranco
con ansiada pureza
y deseos de eternidad
*
Y la torre indiferente.
¨¨
ALEJO URDANETA
Comentario
Las construcciones que no hice
se levantarán en nuevas torres
campanarios de oración y cielo de tormenta.
Excelente versar
mary
¡Precioso poema, Alejo!, mismo en el cual expresas, de manera personal y metafórica, tu visión proyectada en base a lo que te ha sugerido la estupenda pintura donde es fácil advertir el notable manejo de la luz que distingue al artista y su obra. Ignoro la identidad del pintor, aunque, de todos modos, he disfrutado. Agradezco compartir, querido poeta y Amigo venezolano. Abrazo sureño y mis buenos augurios para tu amada Venezuela.
Simplemente hermoso.
Saludos Alejo.
Alejo, en tus letras esta impreza, la calidad literaria, la narrativa y contenido que este trovador que te lee, disfruta. Gracias poeta por compartir tu trabajo. DD
Aquí estoy
el mundo mira mis manos vacías
mientras allá en el valle
estará por siempre el quehacer humano
con herramientas de moho
labriegos que no se cansan...
Genial entrega con ese enfoque humanista, profundo y reflexivo.
Gracias Alejo por compartirnos esa fuerza emotiva en tus creaciones acompañada de la riqueza espiritual que va tallando la vida, mientras el tiempo pasa inexorable dejando huellas para la eternidad.
Un placer enorme el entregarme a la lectura de tus versos.
Un saludo cordial.
Y la torre indiferente como el tiempo.
El hombre no es dueño de nada trascendental.
Magnífico poema, profundo y humano
Ha sido un placer leerte amigo Alejo
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
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