Cuadragésimo quinto movimiento, soy una morsa
A Mary Shelley
Muchacha, no sigas apostando historias
porque nacerá Frankestein, o un Prometeo
absurdo que nos recordará la verdad,
encenderá la chispa de lo humano vencido
quizá para iluminar nueva alcoba
para el devenir de la gente;
ya sin cabeza, la morsa del 67
de un siglo cualquiera,
irías a enterrar en secreto,
ah, tú, la muchacha antojadiza de los poetas
vacuos, un siglo antes de mi nacimiento
irías a enterrar tus palabras con otro nombre
aunque el tuyo sería aún inmortal
y no por esa negación ya olvidada.
Y nacerán nuevos monstruos de la ciencia misma
apretujados entre las sombras
mientras dilucidas del mundo
su fe en la palabra futuro, como mantra
jamás pronunciado.
dE MI LIBRO INÉDITO altar de desconciertos
derechos de autor protegidos por ley
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Comentario
Gracias, Críspulo por tu visita, abrazos
Gracias, Nuria, por tu amable comentario y lectura, abrazos
Un placer lee tan bellas letras. Abrazos de amistad
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
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