Con la brisa de la tarde

Se refresca hoy mi alma

Humectada con el bálsamo…

Sangra la vida

Entre mis labios

Sangra el…

Y si lloviera sobre mi espalda

Como llueve sobre los árboles…

      Su tez era espectacularmente negra al igual que sus diminutos y brillantes

ojos, toda ella era pequeña. y delicada. Había sido creada con el mayor

esmero que alguien pueda imaginar; su rostro libre de toda tensión tenia

forma de luna llena y sus brazos terminaban en unas regordetas manos que

contaba solo con cuatro dedos....la habían hecho así y ella era feliz.    

     Era una compañera: en los días de paseo y en los de encierro,…