La primavera canta los aromas,
que emanan desde mismo paraíso
bordeando hacia ti, en hermosas formas
todas vertidas por un haz sumiso;
cuyo deseo es compartir contigo
hasta lo más cálido de tu abrigo,
como si se tratara de un mendigo
anonadado por el dulce hechizo
 
Me imagino la huella de tu cuerpo,
tatuado en lo profundo de mi campo
donde admiro tu señorío y palpo,
la grandeza de una mujer preciosa;
almibarada en los dulces del cielo
a la cual quiero retirar ya el velo,
y de una vez por todas el desvelo
porque los dos somos un gran equipo
Nelson  

Vistas: 67

Comentario

¡Tienes que ser miembro de ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME para agregar comentarios!

Únete a ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME

Ando revisando  cada texto  para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.

Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.

Your image is loading...

Insignia

Cargando…