SUSPIRAR
Tú, fruta jugosa que alimentas dulcemente mis deseos
perfume de rosas que llena mi mente de recuerdos bellos.
Tú, gota fresca que brota del manantial más puro
caricia amorosa que cura soledad y frío.
Tú que con la mirada adormeces el huracán enfurecido
y en tus brazos haces nido para curar al halcón herido.
Tú, la que caminaste sin descanso hasta llegar a lo
profundo de mi alma
la que me dibuja con sus manos con suavidad y calma.
Tú, colibrí de mil colores degustando el néctar de mi ser
arcoíris de alegrías que en tus ojos puedo ver.
¡Tú! la hermosa, la dulce...
la del corazón de bondad
la que me mira, la que me ama
la mujer que me hace suspirar.
¡Tú!
Carlos Eduardo Lamas Cardoso.
México.
Derechos reservados.
Comentario
Iris,
Gracias por tu lectura y comentario.
Saludos y bendiciones!
José Antonio,
Gracias por la visita.
Saludos y bendiciones!
Felicidades , es un bello aporte.
Beatriz,
Gracias por pasar a leer y comentar.
Saludos y bendiciones!
Ronny,
Gracias por tus amables palabras.
Saludos y bendiciones!
¡Bellísimo!
Saludos Castor...
Gracias por tu comentario.
Bendiciones!
MARAVILLOSO POEMA, SIN DUDA.
CON ELECTRIZANTES FIGURAS Y METÁFORAS.
SALUDO POETA. EDUARDO.
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