me tiro encarnecido con el cuchillo en la boca
busco despavorido el pan que me toca
ando las calles perdido envuelto en confusiones
veo niños, hombres, viejos. recogiendo en zafacones
en el puente peatonal un niño pide lodoso
en la calle principal un anciano limosnero
con los labios azulados del hambre hoy es un reo
pasa indolente el patrón , el trabajador y el vigía
la secretaria sinuosa sigilosa en el tranvía
nadie le pone atención indiferencia mal paria
frente al puesto de fritura un limosnero se apuesta
yo le pase por el lado le regale unas monedas
que sensación tan hermosa me sentí útil aventurado
que lo que dios me dio a otro también he dado
debemos hacerlo todos acabar con la indiferencia
el dios divino nos mira en esta tierra perversa
sociedad desamorada falta de amor y cariño
no ves como mueren en las calles
hombres mujeres y niños
debemos poner de nuestra parte
no son perros son humanos
se desperdician en las mesas lo que no nos comemos
el dinero mal distribuido pocos con muchos
y muchos con poco o sin nada
solo nos toca vivir una vida condolida
que dios nos toque el corazón
para dar mas cada día
BRAYNER ABRAHAN GOMEZ BAEZ
Comentario
Así es lo que otros tienen de mas es lo que le falta al otro --
Gracias por la empatía de tus versos hacia los más desfavorecidos de este mundo injusto. Saludos Brayner.
Muy conmovedor el texto que nos compartes, Brayner.
Así es, hay en el mundo una pésima distribución de la riqueza y los bienes en general.
Algunos acumulan desmedidamente y otros no tienen lo esencial para subsistir.
Es muy lamentable ver seres en la calle merced a la intemperie y famélicos.
Gracias por compartirnos tus letras y ¡felicitaciones!
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