Darío:
Hoy descubro tus alas incendiadas del ave fénix;
de una muerte descubrimos lo que es estar y no estar,
lo que significa la soledad y no encapsularnos en ella
El espectro y su ausencia
Nos dio una muy clara muestra de voluntades:
Nos visitó esta tarde
Y descubrimos que no somos tan fuertes como creíamos
Se llevó el alma de tu padre
a cambio de cien lagrimas de soledad.
tú y yo abrazados
revelamos el pan de nuestra vida y voluntad
vemos lo que es la existencia y la defunción
en una sola semilla
que se separa en una puerta
Coincidimos en la estampa del duelo y la resolución
aprendiendo y afrontando este luto…
que se ira con el viento
Tú estas por convertirte en
el ave fénix, esa ave inmortal
que de sus cenizas se levanta
usando el fuego como su propia estirpe
Tú, y solo tú no morirás para mí
y yo menos moriré para ti
siempre estaremos juntos
más allá del cuerpo y resistiendo en una sola alma
Con la muerte que se llevó a tu progenitor
tomo de nuevo tus manos y te miro fijamente
tu solo me dices:
“No temas, la muerte cuando regrese por uno de nosotros
no nos separa porque oraremos
para irnos juntos con ella"
Me besas y con una esperanza de amor
Una lagrima recorre nuestras caras
Comentario
Gracias mis queridos y admirados Elkin, Amelia, Maigualida, Norma Cecilia y Maria Beatriz:
les agradezco de corazón su visita en mis letras
Darío: sabes que nuestro amor es invencible
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