REFLEXION

[NELSON LENIN AGUINAGA ORTIZ]

Padre bueno y misericordioso;

con la venia de tu ser portentoso

me pregunto, si fuiste grandioso

en multiplicar tu bondad con gozo,

¿por qué Señor no hiciste al humano

como manifiestas en el escrito?

donde se dice: El Todopoderoso

lo moldeó, hasta que vino el soplo

¡pero que sucedió me pregunto¡

si cada día existe más odio malsano,

y no lo digo yo por mucho celo;

simplemente, no existe ya nada sano

todo está en estado putrefacto

La Biblia nos enseña tus mandamientos,

y en todos ellos se ve la esencia del amor,

la bondad y el portento; pero Padre bueno,

valió la pena que tu hijo unigénito muriera

colgado de un madero, si a la final

todo es un cronológico al cual se dice

año tras año, Jesús vino a morir por nosotros;

pero y nosotros solo miramos o escuchamos

con gran emoción al principio, hasta lágrimas

derramamos, por la supuesta pena

para luego volver al sendero pecaminoso

arrimados siempre del calumniador,

como si fuera el verdaderamente amigo,

Y ahora en los momentos actuales vividos

nos transformamos en gnósticos o ateos,

lo mismo es para las circunstancias

de desconocer tu mandado; fundamentados

en los grandes descubrimientos y en la suprema

inteligencia adquirida, que nos vuelve mezquinos

o autosuficientes, de llegar a desconocer

tu poder basados en convertirnos ahora,

como en el antiguo Israel de ser dioses

de nosotros mismos, sin obedecer Dios amado

que nada se mueve sin tu voluntad. Apiádate

Señor y perdónanos por ser pecadores 

Nelson