RECLUIDOS

[Ronald Bonilla Carvajal]

Hay en ti una tristeza

mayor que la curvatura del sauce

entre la niebla.

Y en mí

una tristeza que no cabe

en la garúa insondable de la tarde.

 

Sin embargo, son apenas las nueve

de una mañana que insinúa sus antenas

contra el cielo.

 

Vas recluida en esa carrocería gris

contando los espacios para llegar a algún vacío,

o los segundos que también yo voy contando

en la pizarra del desdén o la desidia.

Hay una tristeza en ti que me desgarra.

Yo que tanto he amado la sonrisa

que los rayos del fervor impregnaron

en las gotas del rocío.

 

Yo que te amé tantas veces

incendiado,

ya no se qué hacer con esta lágrima,

a veces borrosa del olvido,

a veces infructuosa del amor.

 

Vas recluida en este instante

donde ya no estoy,

y sin embargo, yo que tanto te amé

no te conozco,

no sé el nombre que esta ciudad te ha dado

quizá en el grito de algún hijo ausente.

Quizá.

 

De mi libro inédito LA LUJURIA DEL PÉTALO

Derechos de autor reservados por ley

[Ronald Bonilla Carvajal]

Gracias, Jhonny Olivier, por psar y dejar tu opinión que me motiva, abrazos

[Jhonny Olivier Montaño]

Hermoso poema amigo Ronald, como siempre nos sorprendes con esas auténticas metáforas a las cuales nos tienes acostumbrado, gracias por compartir. 

[Ronald Bonilla Carvajal]

Gracvis, Hugo Mario, un placer recibir tu visita por estos versos, abrazos

[Hugo Mario Bertoldi Illesca]

El poeta escribe según su ánimo se lo indica. Esta vez nos hablas, Ronald, de cierto desconcierto, ese que suele llegar al alma cuando no se halla el motivo para sentirnos mejor. Agradezco compartir este nuevo poema en el que vemos tu vena de creador incansable, constante y amoroso. Abrazo sureño y mis buenas energías. 

[Ronald Bonilla Carvajal]

Gracias, Trina, por pasar y dejar tus impresiones, abrzos

[Trina Mercedes]

Este poema transmite, desgarra el alma y yo que estoy en una de esas tardes melancòlicas, me pega de verdad. Gracias por compartir. Un placer leerte.