PERFECCIÓN

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

Perfección

PERFECCIÓN

          Nunca había conocido a mujer alguna con esas cualidades. La conocí realmente por accidente. Casualmente me la encontré un domingo en el mercado, a donde yo acostumbraba a ir a almorzar los domingos. Cansado estaba ya harto de tanta soledad; y la paliaba un poco con distractores como esos, salir a caminar, ir a desayunar, a almorzar, caer al cine casi a ver cualesquier cinta de modo indiscriminado, entrar a una librería o a una cafetería o ir a cualquier sitio, por ejemplo, inventar la visita a algún familiar o a un amigo. Pero encontrarme con Stella, que así se llamaba, rompió mi rutina. Desde ese momento comencé a no sentirme solo, y no lo estaba. La Mujer Perfecta, esa mujer, Stella, me hizo cambiar de planes y, desde ese día, hasta hoy me dediqué de cuerpo entero a servirla y adorarla...algun día nos casaríamos pensé...

Modigliani.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Muchas gracias estimado Críspulo; feliz jueves vespertino y salud a tus costados!

Monet.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Gracias querida Liliana Mariza; muy saludable jueves!

Vallotton.

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

Y claro el hombre encontró UN MOTIVO para su vida!

Esto va con la importancia de las METAS Y OBJETIVOS que debemos tener en la vida; aparte del AMOR que todo lo cambia, todo lo puede.

Buen relato con un mensaje grandioso entremetido mi querido Benja!

Besos

[LUCÍA GÓMEZ]

Qué bonita prosa, querido poeta. Un gusto pasar a leerle.

"y, desde ese día, hasta hoy me dediqué de cuerpo entero a servirla y adorarla...algun día nos casaríamos pensé..."

[Liliana MarIza Gonzalez]

Excelente prosa

mary