NUEVOS SORTILEGIOS (XXXVII)

[Hildebrando Rodríguez]

NUEVOS SORTILEGIOS  (XXXVII)

 

No conviene quedarse

en la morada,

porque ahí nunca avanzas,

ni aprendes nada.

 

Si es que el amor lo entregas,

sin que se agote,

es que aprendiste darlo

con estrambote.

 

Hildebrando Rodríguezc

C. I. V-651.103

Mérida-Venezuela, 09 de diciembre del 2019

[Hildebrando Rodríguez]

QUERIDA ESCRITORA AIMÉE GRANADO OREÑA:

Estimulantes tus expresiones.  Gracias.

Hildebrando.

[Hildebrando Rodríguez]

QUERIDA ESCRITORA MARÍA BEATRIZ VICENTELO CAYO:

Gracias por tus conceptos en relación con mis sortilegios.

Hildebrando.

[Aimee Granado]

Sortilegios que nos tocan el alma y seducen con el encanto ingenioso de su creador.

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

Si es que el amor lo entregas,

sin que se agote,

es que aprendiste darlo

con estrambote. 

Siiiii... cuando a uno le inculcan DAR,  todo es normal; y DA, y DARA siempre.  Lo hermoso de este buen hábito es que se DA sin pensar en recibir;  a veces también SE DA, sabiendo aún que te pueden pagar mal pero es que se debe DAR  sin pensar en una devolución o en un intercambio porque eso ya no sería DAR, SERVIR, eso sería NEGOCIAR.   Ese DADOR no vale nada, así DE millones y millones de dinero.

El DADOR ALEGRE, el que  DA sin ningún interés, únicamente el de COMPARTIR, buscando el PLACER DE SERVIR ese es el que Dios bendice.

El tema es muy amplio mi querido señor Hildebrando, porque se puede uno desviar precisamente en DAR un comentario que no nos cuesta nada.  Pero de ese simple hecho nada más,  de no querer dar UN COMENTARIO nos damos cuenta con qué clase de persona o personas estamos tratando.

Este SORTILEGIO merece un MAR DE APLAUSOS!!

El primerito el  de AVANZAR,  de igual modo es MARAVILLOSO, porque quien no avanza, no busca cambios, se queda en lo arcaico, estancado, en lo antiguo,  en la ignorancia; y ello no es vida,  sin embargo siendo el hombre el único responsable de su supuesta desgracia,   se queja que la vida lo maltrata.  ¡Inversímil!   Porque si la vida te trata mal supongamos  ¿Qué haces tú para enfrentarla?  Nada?  Quejarte?

¡Muy inteligentes AMBOS SORTILEGIOS amadísimo señor Hildebrando!

Muchas gracias y sendos aplausos para usted!!