NIÑO COMERCIANTE - - Bolivia: Unicef expresa preocupación por legalización del trabajo de niños de 10 años

NIÑO COMERCIANTE


Se gestó en aroma verde
en la chacra ,en el campo 
sus padres con la cosecha
lo alimentaban y hacían negocios

      Se amamanto, gateo,aprendió  

a vivir lo que le daba la madre tierra.

Su ilusión ,sus sueños navegaban
siendo un gran señor o rey
del pollo,de la cecina, 
de la uva,naranjas,papayas,cocos,
de la yuca o habichuelas.
No tenía tiempo para jugar,
apenas si estudiaba lo elemental
por que él será 
un gran vendedor
carga ,vende ,regatea
en su infantil  existencia
anhela ser un magnate.
 
Venderá licores ,helados o mermeladas,
sus padres campesinos comerciantes
le han enseñado el oficio
como ser un buen negociante.
 
Cogido de la falda de su madre
cuando apenas sabia caminar
se acomodaba en una esquina 
junto a su mamá
 de la que repetía cual eco
a todo pulmón
paaapayas,pomarooosas,aguajeees....
 
Así fue, crece que te crece 
al llegar a la niñez 
con su madre hacia ensalada de frutas,
inshicapi, cecina con chorizo, juane
 y por su cuenta 
hacia chupetes y  refresco

ambos de diferente sabor de fruta.


Un día cualquiera 
comenzó a vender por las calles 
y la plaza de armas grita que grita...
¡¡¡chuuuupetes casera ,chuupetes
de aguaje,uva y coconaaa
riiicos chupeeeetes!!!
el no tenía otra meta
él solo quería ser un gran negociante.

¡galletas,cigarros,chicles caramelos!
 
Con los otros niños que trabajan en la calle
aprendió a lustrar zapatos por una propina 
limpiaba parabrisas.
 
Para hacer crecer su capital
recogía material reciclable,
vendía hasta basura.
 
Era un niño muy listo y alegre
muy simpático y despierto
compartía con su familia
  lo que ganaba.

Hijo último de doce hermanos

en un tiempo 
donde regia el dicho:
"tendré los hijos que Dios mande".
 
Trabajó duro, no conoció el desayuno 
a veces hasta ni almuerzo
por la noche comía su yuca o tacacho.


Iba a dormir y soñaba 
que descalzo subía  altas montañas
encontraba cantos rodados
en los que resbalaba,caía y se levantaba
y seguía subiendo la cuesta 
para llegar a la cima.
 
Con su gracia conquistó corazones 
chicos y grandes lo amaban y admiraban.
 
 
Navidad era un gran negocio
para la realización de sus sueños
aunque el nunca tubo regalos
ni se dio gusto con antojos;
celebraba sus ventas de ese día,
tenía una familia muy grande
trasnochaban la fiesta
 y muy cansados dormían.
 
¿Que como conozco su historia ?
Lo invitamos a nuestros encuentros
mis amigos y yo a vivir en comunión...
Yo era niño misionero
de aquellos que responden
 ¿De los niños del mundo?
¡¡¡Siempre amigos!!!
 
Hoy después de mucho tiempo
regreso a mi Selva querida
y encuentro el final de esta historia
mi amigo tiene una enorme granja,
tiene centros de relax y esparcimiento.

Maneja un flamante auto

con sus hermanos tiene camiones de ruta 
y viaja en avión al extranjero 
haciendo grandes negocios,
con artesanía y gastronomía,
promueve  el turismo
y eso que a las justas terminó la secundaria
ahora es un gran hombre de Empresa
a ejemplo y carisma de sus conciudadanos
gente de negocio;
raza de  comerciantes.

Adela Mendo Flores
Trujillo -Perú

Jueves, 24 de julio de 2014

El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) expresó su preocupación por las excepciones que contempla el nuevo Código de la Niñez y Adolescencia de Bolivia para que puedan trabajar legalmente niños de hasta 10 años.
"La erradicación del trabajo infantil es sumamente relevante para alcanzar la eliminación de la pobreza extrema y el hambre y asegurar que todos los niños y niñas puedan terminar la escuela primaria. También ayuda a combatir la violencia contra la niñez, el analfabetismo, el sida y otras enfermedades", señala Unicef en un comunicado.
El organismo recuerda que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) considera el trabajo infantil y sus peores formas un daño para la salud de los niños que pone en peligro su educación y conduce a mayor explotación y abuso.
El nuevo Código de Niñez y Adolescencia de Bolivia permite en determinados casos que los niños trabajen desde los 10 años por cuenta propia y desde los 12 por cuenta ajena.
 
El 7 de Julio se publico la siguiente noticia:
A sus diez años, Yaguar Mamani Paredes ya sabe lo que es negociar sus derechos con un gobierno y, aunque probablemente en su clase de quinto de primaria aún no le han enseñado el concepto de cabildeo, eso es precisamente lo que ha hecho en los últimos meses.
El niño, que trabaja desde que tenía seis años vendiendo jugos en un mercado callejero del barrio obrero de Villa Fátima, en La Paz, ha mantenido varias reuniones con legisladores bolivianos para convencerlos de la necesidad de que la ley reconozca el trabajo infantil en su país.
Mamani es miembro de la Unión de Niños y Adolescentes Trabajadores de Bolivia (Unatsbo), el sindicato que este mes logró que la Asamblea Nacional apruebe una reforma del código de la niñez y adolescencia para reducir la edad mínima del trabajo a diez años en casos excepcionales.
Yaguar lo hace cada día desde hace años al salir del colegio cuando va al mercado donde trabaja su madre a vender jugos entre las 4 de la tarde y las 9 de la noche.
Él lo tiene claro. El trabajo le gusta. Vendiendo, dice, "puede aprender a sumar y multiplicar" y con el dinero que gana, su mamá le puede comprar "útiles y cosas para el colegio". Eso sí, lo que menos le gusta, según confiesa a BBC Mundo, es que por el trabajo se duerme "un poco tarde" todos los días.

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