MIRO SIN MIRAR

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

MIRO

SIN MIRAR

Observo a mi derredor;

no hay enemigo delante,

ni detrás:

es mi conciencia hostil que me fatiga...

 

Tomo tu mano,

miro tus piernas

y tengo sed de ti;

soy el perseguido de mi mismo

que no descansa en paz

hasta estar en tu regazo...

 

Miro, lentamente miro;

observo con detenimiento:

el tiempo vuela,

corre de prisa,

¿alguien lo persigue?

Somos nosotros

que detonamos la paz

del mediodía por el infierno

de los amaneceres.

Me quedo con la noche;

reposo en tu mirada,

tocando tu piel

¡soy eterno!

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Muchas gracias estimado Críspulo; estimulante jueves!

Sor Juana Inés de la Cruz, Benito Nogueira, mexicano.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Eres culpable, querida Delia Pilar, con tu comentario que yo no quepa en ningún lado, gracias por tu desmesura y certero tino para escoger una parte tan apetitosa de mi poema; agradezco asimismo tu felicitación; feliz descanso y maravilloso jueves!

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Gracias por tu declaración querida Aimée, así como por tus palabras y por el destacado que me has otorgado para hacer crecer en mí la gana de escribir; reposa, descansa y ten un luminoso jueves!

Felipe Santiago Guriérrez en el Museo de Bellas Artes de Toluca.

[Delia Pilar]

Observo a mi derredor;

no hay enemigo delante,

ni detrás:

es mi conciencia hostil que me fatiga...

Todo el poema es precioso, pero esta primera estrofa me deleitó por su sabiduría y elaboración.

Escribes muy lindo y realmente fascinas a diario con tu poesía.

 

[Aimee Granado]

Te quedas en la noche, reposas en su mirada, acaricias su piel, solazas la esperanza y te sientes cual iluso soñador que abre su horizonte hacia lo eterno.

Me ha encantado leerte.

Como siempre, tus entregas son un grato regalo que enriquecen el espíritu e inspiran.

¡Te admiro amigo!

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Mil gracias, querida Vilma Lilia, por tu lectura y opinión; muy saludable miércoles!

[Vilma Lilia Osella]

QUÉ PERFECCIÓN, EN LA ESCULTURA Y EL POEMA. UNA DANZA CONJUNTA DE BELLEZA Y TERNURA.

VILMA LILIA