LA MINA DE ORO
En la semipenumbra de la desesperación,
te siento.
Te siento latiendo acelerado,
con la mirada ausente.
Rígido en el tiempo.
Buscas oro,
el oro fantasmal de la fama,
los aplausos.
En la búsqueda te abrazas,
se diluye la vida
en necias despedidas.
Se desgastan las ganas.
Se seca el huerto,
se vacía de ardores.
Cae el crepúsculo,
la noche se hace fría,
tan fría.
Si tan solo notaras
que en tu búsqueda
perdiste la mina sagrada del oro
donde brillan los cristales del amor.
Carmen Amaralis Vega Olivencia
Comentario
Beto, querido amigo, gracias mil, cierto, con las despedidas se nos seca el alma, bendiciones de luz, Amaralis
Armando, ciertas tus palabras, amigo, gracias por tu lectura y compañía en mis versos, bendiciones de luz, Amaralis
°°°Se seca el huerto,
se vacía de ardores.°°°
Una triste revelación que brilla por su significado.
¡Bello poema!
Un abrazote va en camino, Carmencita.
Cuanta verdad has tallado en esas líneas
de cuando erramos en el tiempo
y la vida
A veces uno mira hacia atrás y repasamos
con dolor
ya sin posible retorno
que el mejor filón de oro
quedó olvidado
en aquella estación que dejamos atrás
ilusionados
enceguecidos
por un silbato de tren y su movimiento
Un cordial abrazo Carmen
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
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