Al abrir la puerta
está el batir de la arena
Ya el custodio del faro
levantó los cerrojos
Se abre el exilio.
Dejaste sobre las piedras
las armas de la guerra
las azules banderas
cubiertas de polvo estelar
Fuiste en tu andar sobre las dunas
sin el espíritu diurno
sin ningún adiós
El altar de las ofrendas
quedó aprisionado en la roca
el lecho está vacío
sobre el abismo y la niebla
El vapor matinal en la arena
traza desnudas hondonadas a tu paso
Corren tras de ti las alimañas
en el alba
sin alimento
sin abrigo en la tormenta
Fijas los ojos en la ceniza
en los despojos del viento
Aquel que vagaba en el silencio
medianoche en galería de piedras
busca ahora el hospicio de la isla
el caserón de tiza blanca
un cuenco de agua pura
el plato dulce de la tierra
Sueña compañía y lujuria
sueña el oleaje en los labios
de la mortal caverna
en la hora solitaria del espejo
Calveros verdecidos
senderos poblados de flautas
cencerros de alegría matinal
Confunde el rumor marino
con el murmullo de abejas
en el árbol del estío
A cada relámpago del agua
percibe el resplandor del fuego
en la hondura del refugio
Huésped precario
andariego
sin coordenadas
ciego ante los astros
El exilado del mundo
camina hacia otro mundo
&&
Comentario
La mortal caverna entre sombras
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
© 2024 Creada por Aimee Granado Oreña-Creadora. Con tecnología de
Insignias | Informar un problema | Política de privacidad | Términos de servicio
¡Tienes que ser miembro de ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME para agregar comentarios!
Únete a ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME