Yo partí de ti muchas veces con los años, pero fue tan difícil, con cada amanecer cuando mis ganas quemabas tatuándome la piel bajo el cobijo, para morir de nuevo al buscar tus huellas en tardes de ausencia, dejando en mí tú clara esencia descubierta, y sin embargo, terco, al sentir tú aliento en mi pecho regresar de nuevo al calor de tu hoguera, para rondar la demencia en presentimientos, sin entender que amarnos no basta y construir mañanas nos es negado sueño, que el terruño en qué se fundan nuestras vidas, para uno es cielo y para el otro suelo, porque somos diferentes, y eso, lo lamento, no podremos cambiarlo, al nuestra naturaleza requerir diferentes alimentos, abre ante nosotros el camino recto de las anchas praderas y el firmamento para el vuelo, para llevar el bonito recuerdo de un amor envuelto entre plumas y pelos.
MARIO MARTIN
26-06-16
Comentario
Yo partí de ti muchas veces con los años, pero fue tan difícil. Con cada amanecer cuando mis ganas quemabas tatuándome la piel bajo el cobijo. Para morir de nuevo al buscar tus huellas en tardes de ausencia, dejando en mí tú clara esencia descubierta. Y sin embargo, terco, al sentir tú aliento en mi pecho, regresar de nuevo al calor de tu hoguera. Para rondar la demencia en presentimientos, sin entender, que amarnos no basta y construir mañanas nos es negado sueño; que el terruño en qué se fundan nuestras vidas, para uno es cielo y para el otro suelo. Porque somos diferentes, y eso, lo lamento, no podremos cambiarlo, al nuestra naturaleza requerir diferentes alimentos. Se abre entonces ante nosotros el camino recto de las anchas praderas y el firmamento para el vuelo, para llevar el bonito recuerdo de un amor envuelto entre plumas y pelos.
Gracias querida amiga, Beatriz. Te agradezco tu sinceridad y dedicación. Valoro enormemente el que me señales los errores, es la única forma en que puedo aprender, e ir superando mis propias limitaciones. Te cuento, cuando comencé a escribir en este Foro y en otros como Goglee+, no hubo nadie que me los señalara, todos se dedicaban a darme felicitaciones, colocándome graficos aplausos y reconocimientos. Pensé que “me la estaba comiendo”. Lo importante para mí, era dar un mensaje, expresar mis sentimientos y emociones, pero por falta de preparación y conocimiento descuidaba las formas. Fue cuando a través del privado, un verdadero amigo, José Valle Valdéz, escritor cubano, me hiso algunas críticas y recomendaciones. Se lo agradeceré eternamente. A raíz de eso dejé de escribir en “versos” y comencé a escribir “en prosa”, tratando de conseguir mi propio estilo.
Gracias de verdad, por ayudarme. Espero ser buen alumno.
Te copio las modificaciones que le hice y espero tus comentarios. También publico lo que escribí en aquel entonces luego de tan singular experiencia.
Un fuerte abrazo
Gracias Jaime por tus alentadoras, pero un tanto exageradas palabras. Gracias hermano. Saludos. Un abrazo
Gracias mi querida Mab. Un abrazote desde mi Venezuela. Saludos
Gracias, mi estimado amigo Elias Antonio. Saludos. Un abrazo.
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