EN ESTE TREMENDO PÁNICO DE CORONA
En este tremendo pánico, el miedo se desboca,
agrieta y estorba el alma, afuera todo bulle vertido
en un aire envenenado, sólo el pánico alza su vuelo
en esta tempestad retumbada. Los hombres huyen,
la luz se aleja, el sol se aturda, el viento aletea la cara
solloza del mal tiempo, quizás no habrán más días de
besos y abrazos, todo ocurre tan pronto, un espejismo
disfrazado que convierte las antiguas verdades en
severas trampas, el agobio se acerca a pasos gigantescos,
enturbia el aire del silencio, el cuerpo dice no a la muerte,
al saqueo, a la sed y el hambre, el cuerpo llora como el
agua de los ríos entre las últimas espigas de los campos.
Es como un crucifijo de papel que tiembla con el viento,
el verdor se aleja, el sol se apaga, es el evidente terror
de un enemigo jamás conocido, se acerca el ocaso, canta
su fiebre como una araña que teje sus redes y artificios,
todo parece un concierto de despedida, un mar revuelto
en sus costas atormentadas, la vida se sacude de sus
sueños y semillas, insiste el miedo bajo la rabia del oscuro,
el tiempo se detiene, se agolpa en su insomnio, grita su
malestar en ladridos de demonios, es como una pena
sin voz en su sueño naufragado, cae el tiempo, gira y
divaga, la luz se demora, la fiebre crece, insiste el oscuro,
el mundo se transforma, se perfora su transparencia
en lenguas de llamas y heridas, no hay nada que sane
y salve el cuerpo castigado, todo ruge, aúlla, llora y tiembla.
Crecen en el aire diablos invisibles, las nubes se desploman
sobre el cuerpo enfermo de la tierra, todo se agita
como la hoja de un álamo calcinado, todo se confunde en la
vigilia y el espanto, la noche se opaca entre sombras
sacudidas, todo se arroja a los hombros del precipicio,
todo es temor, la boca se viste de la yema podrida del aire,
una boca muda donde ya no caben las plegarias, una boca
que ya no dice nada, sólo se mueve en blanco y negro
amarrada al oscuro, abrazada al miedo, una boca de ceniza
entre los labios, una boca que se pierde y se muere como
una infancia helada, una mariposa sin alas adentro de un
espejo roto, algo que castiga y condena en la gris distancia
entre la vida y la muerte, algo ya no humano, ya no imaginario,
una iracunda y agresiva pesadilla en su atávica y fijante amenaza.
All rights reserved to Ronny@Levy Benlabrat, Israel 2020.
Comentario
Es un hermoso poema.
Lo felicito, Levy.
Tristísimo pero real, el pavor se apodera de los seres humanos,
situación que los hace más vulnerables. Hermoso poema.
¡Felicitaciones, Ronny!
Muy bueno , muy triste , muy real
Cuidate mucho Ronny
Gracias
mary
En medio de este torbellino de miedos, pesares y llantos,
todavía sale la luz de tu valentía y la serenidad que asombra,
porque todo lo que describes en tu prosa poética,
hace ver lo cruel y tensionante del momento que estamos viviendo
sin dejar de acariciar la flor de la esperanza, en un nuevo amanecer.
¿Cuándo?
Es la interrogante de esta dolida incertidumbre mundial.
Cuídate Ronny.
Bendiciones para ti.
¡Excelente poema en prosa, documentando el presente, Ronny!
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
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