Ahí recogido en su lecho
ha decidido crear su universo
con su pluma gastada
Y papel de desecho
Hasta quiso dibujar un verso
con su aliento en el espejo,
trazado con sus manos,
e iluminado con sus ojos.
Y aunque su mente
le pide que cese,
su corazón lo enternece
Y sigue escribiendo,
hasta que amanece.
Y al despertar se da cuenta
que el tiempo no merma
y de tantas lunas ya
ha perdido la cuenta.
Finalmente concluye
que la poesia
es un arte enranciado
como un cuerpo inerte
que ha sido exhumado.
Y aquel día de invierno
lluvioso y nublado,
comienza a temblar
con su pecho agitado,
y al final fallece
el poeta olvidado.
Autor: David Robles
@2020
¡Tienes que ser miembro de ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME para agregar comentarios!
Únete a ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME