EL COLOR DE MI CIUDAD

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

EL COLOR DE MI CIUDAD

El color de la ciudad en que nací

es rojo fosforescente.

Pero, a veces

es gris,

del color de mis tristezas

o de mis anhelos no cumplidos.

Mi ciudad es roja,

como la sangre de mis venas,

como el color de la piel

de los niños toluqueños

expuestos al sol de nuestra

montaña.

Mi ciudad es roja

del color del uniforme

de mi equipo de futbol

el Toluca

que desde niño,

hace 65 años veo en su estadio

provinciano

que ya es ahora metropolitano

-con el Centenario del equipo

fundado en 1917-

y su transformación.

Seguimos llamándole a ese estadio

la Bombonera,

porque es una caja de juguete

aún ahora para mirar

a los futbolistas muy de cerca.

Ahí, enfundado con una camisa roja

llevé a una, dos, tres, tal vez cuatro

novias...hasta quedarme con

la definitiva,

la Madre de mis tres hijos,

mi amada mujer,

con la que tengo 44 años de casado.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Bien dicho Hugo Mario; coincido puntualmente en tu reflexión muy personal y se muy bien que nada es casual, sino causal; para referirme a la química que hemos tenido ambos pese haber tanta distancia!

Éxtasis, Giovanni Mancini, italiano.

[Hugo Mario Bertoldi Illesca]

Desde hace tiempo, querido Benjamín, tengo en claro que eres un hombre de solventes principios, los que se ven con claridad en tus letras, mi admirado cuate. El Club de los Halagos Mutuos, como muy bien defines, es una institución de creación espontánea y en respuesta a la necesidad de hallar apoyo a la propia renguera más que la de reconocer el mérito ajeno, pues, cuando estamos seguros de nosotros mismos, no será la falta de elogios exagerados lo que doble nuestra cerviz en gesto vergonzoso. Algunas veces siento pena al advertir con qué poco se autoengaña quien acepta la evidente zalamería de los que solo se alimentan de los comentarios positivos y echan fuego por las pupilas en lugar de agradecer sugerencias que ayudarían a mejorar sus creaciones literarias. Ya he dejado de comentar a quienes evidenciaron molestia ante mis sugerencias de corrección. ¡Sigan errando, que los de igual pensamiento se atraerán y así seguirán descendiendo sin chance alguna de aprendizaje!

P.S.: tu bonomía y coraje cultural causan mi admiración, mi amado cuate. Aún teniendo contrastes, tú y yo no lamemos trastes. Abrazonrisas y buenas ondas. 

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Querido Hugo Mario, primero muchas gracias por el par de correcciones que agradezco y no debes nunca disculparte, estos sitios deberían ser para "eso" y no para el Club de los Halagos Mutuos que tanto he criticado; en segundo término mi agradecimiento asimismo por tu comentario y los saludos a mi familia!

Que el calor allá amaine mientras aquí sufrimos un crudo invierno.

Museo Orangie de París, Francia. Perros, autor no registrado.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Mil gracias, querida María Beatriz; hasta la bella Perú que me enamoró cuando la conocí mis deseos porque tengas una semana maravillosa!

Edward Munch, 1890.

[Hugo Mario Bertoldi Illesca]

Hermosa manera de describir a tu ciudad, mi estimado Benjamín. ¡Preciosos e imborrables recuerdos! 

P.S.: sugiero revisar el sexto verso de la primera estrofa, donde sobra una "s", y el segundo verso de la última estrofa, donde falta un acento. Ofrezco mis disculpas por el atrevimiento y envío gran abrazo desde Argentina para ti, Emiret y tus amadas mascotas. Aquí hace mucho calor en esta noche estival sudamericana. 

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

Un escrito que narra vivencias de chiquillo,  de futbolista y hasta de novio:  dos, tres, cuatro   ¡Se perdió la cuenta!  jaja

Gracias Benja lindo!!

Muy lindo!