Cuánto me alegra saber que todavía hay personas como tú, que disfrutas leyendo una poesía, oyendo el murmullo de las aguas, oliendo el aroma de las flores, sintiendo la brisa de la aurora y te alegras con el canto de los pájaros, ese canto que se enreda y se pierde entre las hojas de los árboles.
Así, se enreda y se pierde en la soledad de su nostalgia el canto del poeta.
Tal vez, sea yo el pájaro agonizante que se arrastra en esta inhóspita jungla de asfalto y de cemento y el turpial sea el poeta, que entona su gorjeo en la profundidad azul de la arboleda.
Gracias por regalarme unos preciosos minutos de tu vida, por tu linda mirada, la luz de tu sonrisa que ilumina de amor y de esperanza, esta desértica presencia.
© Cástor A. Olivier O.
El hijo del Cisne.
Venezuela.
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
© 2024 Creada por Aimee Granado Oreña-Creadora. Con tecnología de
Insignias | Informar un problema | Política de privacidad | Términos de servicio
¡Tienes que ser miembro de ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME para agregar comentarios!
Únete a ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME