CUANDO LLEGA LA CALMA

[Nolbert]

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En la noche, de fúlgidas estrellas,

aparece la luna en las colinas,

y rasga el infinito las centellas,

a través del espacio y las neblinas.

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Un lucero, que emerge del oriente,

se asoma en la quietud de una ensenada,

y se mese al vaivén de la corriente,

como novia al espejo enamorada.

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Un concierto de quejas y lamentos

se desprende del canto de las olas,

que arrastradas por fuertes elementos

semejan ninfas en la noche, a solas...

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Y aquí en mi pecho el corazón suspira,

cual las ondas, que mueren en la arena,

me recuerdan las notas de mi lira,

que arrullan mi alma en la quietud serena.

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Un relámpago, diáfano y ligero,

devela el valle y su esmeralda calma,

y a veces se oye el canto lastimero

de alguna alondra, en la profunda calma.

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Nolberto Marín.

[Liliana MarIza Gonzalez]

Y aquí en mi pecho el corazón suspira,
cual las ondas, que mueren en la arena,
me recuerdan las nota de mi lira,
que arrullan mi alma en la quietud serena.
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Felicitaciones!

mary

[Delia Pilar]

Un maravilloso mensaje de amor y paz en este poema de estructura tan lograda. 

Realmente es un gran placer leerte, Nolberto. 

Felicitaciones y va toda mi gratitud por tu aporte a OME.

[Iris Girón Riveros]

Una evocación nostálgica

susurra los aires de un claro tiempo

cuando un lucero  del garzo cielo

se inclina ante el canto triste de una alondra.

Hermoso poema estimado Nolbert.

[Aimee Granado]

Y aquí en mi pecho el corazón suspira,

cual las ondas, que mueren en la arena,

me recuerdan las nota de mi lira,

que arrullan mi alma en la quietud serena.

 

Y es que conmueve tanta belleza que nos transmites en tan maravillosos serventesios. Una joya que he disfrutado con esa paz que sugiere y que alcorza el espíritu con las delicias de la imaginación, que hace milagros entre letras preciadas.

Arrulla el alma en la quietud serena

la lira sosegando sus anhelos,

ofrece esa pasión sana que ordena

vencer al desamor y a sus desvelos.

Gracias amigo por regalarnos la inspiración que divina surte sus albricias para enamorar nuestros sentires.

Un placer poder disfrutar de tanta belleza.

La poesía nos une y nos acaricia el alma con sus bondades.

Saludos afectuosos.

¡Felicitaciones con aplausos merecidos!