AHORA

[Ronald Bonilla Carvajal]

 

Ahora que todo nos envuelve y nos dispersa,

ahora cuando acuden recuerdos inconexos

y las naves y luces disputan un lugar en el espacio,

encerrado entre dispositivos

me pienso como un poeta retrógrado

que solo puede ejercer entre su mente,

desaparezco de los controles

y me sumerjo en una simbiosis

con lo poco que resta de mi cuerpo original.

Todo fue dicho y nos queda esta comunicación

sin palabras.

 

Pero esta noche diré mis versos con orgullo.

El espacio se ha colmado de gente ávida.

Aunque allí está esa sombra,

redundantemente oscura,

la que anheló una guerra.

Pero el amor siempre puede

incluso lo inasible.

Mi destino iniciaba su cópula con una palabra

que fuese más que viento.

Aunque el olvido siempre

nos tiña de melancolía.

 

II

 

También un día  llevamos nuestras voces a Guatemala.

Duncan reivindicaba esa parte de patria postergada,

yo blandía mis cicatrices buscando la aurora.

Eran nuestras señales

en una Centro América densa, dividida;

la muerte recorre aún los campos y las ciudades.

La paz fue tan solo una corona insatisfecha.

Algunos amigos se recuperarán

mucho tiempo después con el internet,

como pasó  con Arturo, su Perú-Vallejo

y su dolorosa iluminación en la montaña.

 

Habíamos sido inicios de una guerrilla

cuyo germen quizá no estuvo

en el corazón del pueblo.

Ahora primero habremos de revolucionarnos por dentro

para luego buscar en el hermano que somos todavía.

 

Debravo lo dijo y postuló su sed evangelizadora:

Que amo, que os amo y que no tengo sitio en el infierno.

De unnuevo libro inédito.

Derechos de autor resrvados por ley

fotos ciborg en una nave

Ronald Bonilla en Recital

Jorge Debravo

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

[Ronald Bonilla Carvajal]

Gracias, Benjamín, por tu mensaje coplaido de que te haya gustado, abrazos

Gracias, Críspulo, por tu letura y mensaje, abrazos

Gracias Delia, por tu valioso y buen comentario, y por el destaado que me honra, abrazos

[Delia Pilar]

¡Cuánto dolor y violencia en nuestra Latinoamérica, Ronald!

Muy sabio texto poético y, como tú dices...

¡cuántas cicatrices son el testimonio vivo de esas luchas!

Habíamos sido inicios de una guerrilla

cuyo germen quizá no estuvo

en el corazón del pueblo.

Ahora primero habremos de revolucionarnos por dentro

para luego buscar en el hermano que somos todavía.

Gracias por compartirnos tu arte. 

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Precioso poema, Ronald; lleno de historia y compromiso!