!ABUELO! ANOCHE TUVE UN SUEÑO.

[Venancio Ramón Castillo González]

Este humilde poema que comparto hoy con Ustedes, nace después de haber leído el Hermoso, alentador y aleccionador Libro “Carlitos Nuestro Aprendiz de Ciudadano” escrito por la Gran Escritora Venezolana Carolina Mata Mata. Donde a partir de las vivencias de Carlitos, un Inteligente y Precioso niño de tan solo Ocho años, expone sus inquietudes y preocupación al ver como cada día que pasa, todos de alguna manera mancillamos impunemente los Valores y Derechos de los demás. Este es  tan solo una pequeña parte de mi incondicional aporte en esta maravillosa misión que se ha impuesto Carolina de tratar que las personas recuerden que todavía están vigentes y hay que honrar las Hermosas palabras: “Moral y Luces son nuestras primeras Necesidades”  de nuestro Libertador Simón Bolívar.   P.D: Hoy siento una nueva inmensa satisfacción, porque ya lo tenemos declamado entre Carolina y este humilde servidor. Anexo a la presente el Link de la Grabación, nuestro mayor pago es que sea de su agrado, reciban un amoroso y respetuoso abrazo en unión de sus seres queridos, Dios me los Bendiga.      

   

ABUELO ANOCHE TUVE UN SUEÑO.

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¡ABUELO!  ANOCHE TUVE UN SUEÑO. 

 

¡Abuelo!  Anoche tuve un sueño

Y no quiero recordarlo ¿Sabes? Me da miedo

¡Carlitos! Ven acá mi pequeño No debes sentir miedo

Los sueños………. Solo son sueños

¡No Abuelo! Los míos no son solo sueños

Ya que aparte de soñarlos también los veo

 

¡Perdóname Carlitos! Pero te juro no entiendo

Explícamelo mejor por favor te lo agradezco

Está bien ya te lo explicaré Abuelo

Hay noches que se hacen largas Y veo el amanecer lejos

Y no me puedo dormir Por más que lo intento……………

Mi cabecita se llena Sin que yo pueda entenderlo

De preguntas sin respuestas ¿Ahora me entiendes Abuelo?

 

Bueno, Bueno yo pienso que vamos bien

Nos estamos  entendiendo

¡Ábreme! Tu corazón Desnuda tu sentimiento

Bien sabes que para ti el mío siempre está abierto

Ven acá mi Pequeñito Y de una vez comencemos

Yo te escucharé callado Ya que lo que sobra es tiempo

 

Está bien ¡Dime Abuelo! ¿Por qué se perdió el amor?

¿Por qué no existe respeto? ¿Por qué sin haber razón?

Los Valores se perdieron  ¿Por qué si nos enseñaron?

Nuestros Padres y Maestros A saber diferenciar

Entre lo Malo y lo Bueno

Sin haber ningún motivo  Hay días que amanecemos

Como dice la canción Sordos, Mudos y Ciegos

Y hacemos todo al revés Sin fijarnos si ofendemos

Si dañamos o rompemos Alguna de nuestras cosas

Pero otras veces lo ajeno

 

Hoy me enteré que el monito Del zoológico está enfermo  

Porque le dieron un chicle Y eso para él es veneno

Ahí es donde me pregunto Y en la tristeza me pierdo

Si sabemos que eso es malo Entonces ¿Por qué lo hacemos?

Y  cuando te digo Abuelo Que en la tristeza me pierdo

Es que al llegar a mi Escuela Mis ojos no querían verlo

Dibujado en sus paredes Unos garabatos feos

Si esa escuela es de nosotros ¿Por qué tenían que hacerlo?

¿Por qué tenían que dañarla? Violando nuestro Derecho

 

¿Dime por qué los adultos? No respetan la luz roja

Ayer sentí gran vergüenza con nuestra Abuelita Rosa

Que teniendo la luz verde que da paso a las personas

Tuvo que cruzar la calle corriendo como una loca

Y en los vagones del metro desapareció el respeto

Sobre todo a los ancianos que los ponen en aprieto

Para entrar, para salir y sentarse por supuesto 

Los trenes y los pasillos se volvieron un comercio

De películas y libros De Cds y de videos

Pero violando las leyes con el mayor irrespeto

 

Tienen que existir Deberes para que existan Derechos

Y las normas deben ser de obligado cumplimiento

En los parques, en los cines, en todo sitio y momento

¿Podrá un Padre reclamar? Comportamiento correcto

A sus hijos siendo él, el que les da mal ejemplo

Ya no es raro cuando vemos en el estacionamiento

Las papeleras vacías y la basura en el suelo

La contaminación queda en manos de los expertos

Eso es problema de todos debemos de ser honestos

 

El otro día salí a pasear con mi otro abuelo

Y vi en la Universidad carros que consumió el fuego

Entre ellos un camión que les daba el alimento

A un hombre trabajador a sus hijos y a sus nietos

Que hoy están a la deriva de cara a un futuro incierto

Que se estarán preguntando ¿Quién responderá por esto?

No has dicho ni una palabra eres un gran caballero

Cumpliste con tu promesa ¿o es que te dormiste Abuelo?

 

¿Cómo me voy a dormir Mi Niño? Estoy rumiando en silencio

Y no quiero que lo notes…….. Estoy llorando por dentro

De impotencia, de tristeza por el daño que hemos hecho

Por haber impunemente mancillado tus Derechos

Yo no puedo imaginar cuanto me queda de tiempo

Pero si fuera un segundo de rodillas te prometo

Que pondré todo mi empeño por verte otra vez sonriendo

Y que de tu corazón desaparezca ese miedo

Para que puedas cumplir con seguridad tu sueño

Y para hacerte feliz daré hasta mi último aliento.

Venancio Castillo

Cantante-Escritor

“Con el permiso de Cristo el Poeta del Amor”