REDENCION
¡Oh, Señor! Tú que todo lo conoces
y que nada oculto a tu faz es posible,
conoces por entero todos mis reveses,
cometidos por esta mi alma tan feble.
Soy una podrida llaga y hedor hiriente.
Llanto, dolor, amargura como ajenjo,
con arrepentimiento cierto, lágrimas
aniegan mis ojos, surcándome entero,
no bastan para lavar todas mis faltas,
mis rebeliones, mis indignas traiciones.
Nada soy yo, Señor,…
ContinuarAgregado por Luis Ricardo Landeo Ponce el marzo 31, 2022 a las 6:30am — 6 comentarios
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
© 2025 Creada por Aimee Granado Oreña-Creadora.
Con tecnología de
Insignias | Informar un problema | Política de privacidad | Términos de servicio