SÍSIFO, EL MITO Y LA FELICIDAD POSIBLE (ARTÍCULO)

[Alejo Urdaneta Fuenmayor]

Alejo Urdaneta

SISIFO, EL MITO Y LA FELICIDAD POSIBLE

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Tan impactante ha sido la leyenda de Sísifo que Albert Camus (1913-1960), famoso por sus obras sobre lo absurdo y por haber sido nominado Premio Nobel de Literatura, escribió en 1947 un ensayo filosófico sobre el mito de este personaje, en donde planteaba la posibilidad de un “Sísifo feliz” que no reniega de su rutinaria existencia y que ésta puede ser tan absurda o válida como cualquier otra, según el matiz que cada uno de nosotros le podamos dar.

Es en esta perspectiva que muchas personas pueden tener inmersas sus existencias, en donde precisamente subsisten pero no viven. Son atados por las rutinas del día a día, creen poder sobrellevar la carga y éxitos de vidas en forma tangencial. Es a ellas que debemos recordarles que Sísifo no tenía opción; todos los demás sí tenemos la opción de modificar la conducta rutinaria que puede tener dominada nuestras vidas.

Es por estas razones que ocasionalmente debemos recordar a Sísifo, no por su eterno castigo ni por su rutinaria condena; creo que debemos rememorar y reevaluar su situación desde otra perspectiva, aquella que nos permitirá prevenir vivir rutinariamente la única vida de que disponemos. Solamente así podemos volver a ver al personaje descrito como un verdadero amante de la vida a pesar del castigo de la rutina eterna y alguien que a pesar de todo venció la tan temida muerte.

Camus rehusa el suicidio. La vida no tiene sentido y sin embargo hay que vivir. De allí surge el heroismo. La verdadera respuesta, siempre según Camus, es la rebelión representada en la valentía y lucidez, es solitaria, la glorificación del orgullo. Pero la rebelión no tiene esperanza porque nace de la visión de la muerte absoluta.

De esta manera tendrá sentido la frase con la que Albert Camus inicia su ensayo sobre El Mito de Sísifo: “Oh, alma mía, no aspires a la vida inmortal, pero agota el ámbito de lo posible”.

[Ernesto Kahan]

Querido amigo Alejo Urdaneta.

Encuentro que la leyenda de Sísifo, que ora nos condena, ora nos ata a un objetivo loable pero demasiado lejos, es el tiempo individual que por último, es el almuerzo y el café de todos los días y una permanencia en una ilusión casi utópica de un cambio social soñado.

Ernesto K., 2019

[Alejo Urdaneta Fuenmayor]

La respuesta de nuestro amigo Ernesto Kahan da en el centro del tema: La ilusión es la utopía de una vida plena o por un momento que colma la espera. Todos transitamos por el sendero de lo cotidiano, nos queda la inquietud por hallar el misterio de la existencia.

Un abrazo.

Alejo

[Hugo Mario Bertoldi Illesca]

Alguien que dice ser feliz (este que escribe su comentario), querido Amigo, aborda con mucha seriedad este tema, importante, sin dudas, por darle un adjetivo de muchos que le caben. Leida, también, la opinión de Ernesto, nuestro amigo, como muy bien apuntas, considero que tú, él y yo coincidimos en el concepto íntrínseco del tema tratado: la felicidad posible, que lo es, claro, yo puedo dar Fe. En mi humilde opinión, el concepto de inmortalidad nace del deseo humano de pertenecer al círculo privilegiado de los llamados dioses (uno o más no altera la idea concebida) motivado por el temor a ser enviado al infierno en caso de no ser absuelto en el Juicio Final celestial o como se llame a dicho evento. 

P.S.: lo de vivir empujando una enorme roca hacia la cumbre de una montaña, para verla rodar cuesta abajo en las noches, es una metáfora de lo que ha de sucederle a quienes creen estar progresando cuando, en realidad, solo están sumando más problemas a su terrena existencia y es el propio peso de dichos problemas lo que causa ese inevitable retroceso al punto de partida: esto es, la sensación de vacío. 

Sugiero no hacer caso a mis delirios y centrarte en otras opiniones de sensatez comprobable, mi querido venezolano. 

He leido con atención y he aprendido con satisfacción, por lo cual agradezco tanta generosidad, Alejo. Abrazo sureño. 

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

Muchos la relacionan con el trabajo sobre todo el mal compensado.  Otros con el esfuerzo continuo que tenemos en esta vida; por lo que fuera ,  Sisifo y su famosa roca siempre rodante cuesta abajo al llegar a la cima es muy explícita y aplicable en los menesteres de nuestra vida.  Y es porque analizando TODOS SOMOS SÍSIFO!  La alegría y felicidad es que tenemos un por qué existir.

Y si, Camus hace grandiosa referencia a esta leyenda mitológica, cuya sabiduría radica en la aplicación que se le da a la misma.  Y deja el fabuloso mensaje de vida que tan magistralmente en este compartir se exhibe.  No, al suicidio.

Muchas gracias por esta aportación intensamente interesante!

Saludos y mis reconocimientos!  Estupendo ensayo!

[kin Mejia Ospina]

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No hay más que un problema filosófico verdaderamente serio: el suicidio. Juzgar si la vida vale o no vale la pena de vivirla es responder a la pregunta fundamental de la filosofía. Las demás, si el mundo tiene tres dimensiones, si el espíritu tiene nueve o doce categorías, vienen a continuación. Se trata de juegos; primeramente hay que responder. Y si es cierto, como pretende Nietzsche, que un filósofo, para ser estimable, debe predicar con el ejemplo, se advierte la importancia de esa respuesta, puesto que va a preceder al gesto definitivo. Se trata de evidencias perceptibles para el corazón, pero que se debe profundizar a fin de hacerlas claras para el espíritu".

ALBERT CAMUS, en  El mito de Sísifo

[Aimee Granado]

Interesante ensayo.

Camus se refiere al absurdo  como esa esperanza que es la base de un mañana, como si no existiera la certeza de morir. El mundo, despojado de los romanticismos, es un territorio extraño e inhumano. Las vulnerabilidades nos acerca a esa esencia humana y no pueden separarse de ella. Un conocimiento verdadero no es posible, ni la razón, ni la ciencia pueden revelar la realidad del universo: sus intentos yacen como abstracciones sin sentido. 

De igual manera ve en Sísifo al héroe del absurdo, que vive la vida plenamente, aborrece la muerte y es condenado a realizar una tarea inútil, la inacabable e inservible labor como una metáfora presente en la vida moderna. 

Camus se muestra particularmente interesado en lo que piensa Sísifo, mientras camina de regreso a la parte baja de la colina, para comenzar de nuevo. Este es el instante verdaderamente trágico, cuando aquel hombre se hace consciente de lo miserable de su condición.

[ROBERTO XUCHITL PEREZ]

LIC. ALEJO  U.

Interesante artículo que es de irradiación prismal. En un mundo de consumo y deshecho, todos vamos empujando un carrito de supermercado. Esto es cíclico de cada ciudadano.

Pero hay otro Sísifo que vive en nosotros. Este es más vergonzoso que el primero, porque siempre lo veremos subir cuesta arriba con esfuerzo la piedra. De su cabeza testaruda.

GRACIAS POR COMPARTIR.

ROBERTO.

[Liliana MarIza Gonzalez]

Alejo 

Un interesante aporte, vemos en la vida cotidiana representado a Sisifo, en personas que no saben que hacer con su vida y hay michisimos Sisifos en esta vida.