Sobre el eco del adiós

se encuentra un beso sentado
y un abanico de dedos
le brinca de lado en lado.
En un cielo de pupilas
las nubes van desgranando
un horizonte de lluvia,
sabor de sueño salado.
.
Ella partió con la luna
que anocheció en los tejados
dejando lenguas plateadas
en sus oídos bizarros,
y eran briznas de promesas
e ilusiones de centauros
los dioses de las palabras
erguidos en pies de barro.
.
Desde el torreón de los monjes
truena a bronce el campanario
y se destroza el silencio
contra el muro de su llanto
que con ladrillos de pena
raudamente se ha elevado,
como se eleva la ausencia
en el trono de los párpados.
.
El paño de la tristeza
lo atenaza con su manto
y son cuchillos de angustia
los recuerdos del pasado.
Ella partió con la luna
y él muy solo se ha quedado.
Sobre el eco del adiós
el beso yace postrado.
 
Ricardo Alvarez Morel
Derechos Reservados

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Respuestas a esta discusión

una belleza ricardo. versar exquisito. te dejo mis saludos 

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Ando revisando  cada texto  para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.

Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.

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