EL OCASO DEL POETA
-Mario Benedetti a su Musa Mayo 17, 2009 -

De Joseph Berolo R.



Desde el azul celeste, desde la inmensidad
de mis sueños de poeta, náufrago perdido
en la enorme amplitud de mi generosa edad,
eres la sirena de este viejo marinero herido

Mi paso solo alcanza brazas de esperanzas
vano andar el mío hacia tus blancas alas
sin poder llegar a tu ribera, sed que avanza,
viajero apenas soy del horizonte de tus playas.

Tú, mujer dormida en un penacho de palmas
brisa eres de mi tarde, todo en mi de ti se llena,
tu silueta verde abarca los cristales de mi alma.

Quiero amar tu lejanía sin fallecer de pena,
ser el largo ocaso que vigila tus antojos,
y poder mi nave anclar en el iris de tus ojos.

Joseph Berolo R
Presidente Honorario UHE

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Respuestas a esta discusión

Mi estimado Joseph, he leído este poema y me he llenado de esa nostalgia que es típica del poeta. Mi gran maestro Benedetti, se fue a transitar por los predios del cielo y su musa tal vez haya enviudado, alejándose al lugar de las divinidades. Sin embargo, de tal coito, muchas musas grandes y pequeñas han nacido para revolotear como metáforas en nuestras arcas que se abren a la poesía.

Un abrazo
A vida é efêmera, mas as palavras, as poesias, os escritos nos fazem lembrar do autor que nunca será esquecido. Suas linhas, suas palavras permanecem na memória dos que o conheceram ou com ele conviveram. Paz para a sua alma!
todos los poetas amamos a esa mujer misteriosa que nos llena de fantasias y cantos de sirena,hoy nuestro estimado maestro esta en ese plano desde donde puede disfrutar del descanzo,despues de haber caminado por este mundo de indiferencia que solo se acuerda de sus artistas cuando estos ya han desaparecido

descanze pues maestro,que aqui nosotros lo seguiremos recordando con el fuego de sus palabras
Un homenaje a un grande entre los grandes, a ese maestro de muchos, a ese amigo poeta que aun desde su nuevo destino, nos guia y nos une.
Saludos
Hermoso poema para un homenaje imprescindible. Que la Palabra hable cuando la tristeza cunde. Y hable la vida. Y el amor. Y el mismo Cielo que nos de una explicación cuano un hombre como Benedetti asciende a sus alturas.
Carlos Garrido Chalén
Cuando los aires vuelan y los recuerdos envuelven nace el poema. Gracias y mi saludo
Bela homenagem, belo soneto, felicitaciones
Cualquier mujer, de humo o de carne, soñaría con ser soñada por su viejo marinero herido. Seguir siendo brisa de su tarde, y que el iris de sus ojos fuese el anhelado puerto de anclas para su legendario navegante en el ocaso. nisa forti glori
Un aplauso lleno de admiración por tan hermoso poema.

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Ando revisando  cada texto  para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.

Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.

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