EL NIÑO MÁS POBRE DE LA BARRIADA

Ay!! Juancito tan pobre pero tan listico, no le gustaba dormir la mañana porque, aunque no iba a la escuela solía salir muy de prisa a la calle a ganarse algunos centavos para poder llevarle pan a sus hermanos, porque esos niños pobres siempre tienen 2 o 3 hermanos... en fin, él sustentaba su humilde casa.

Ese día era Navidad, él no sabía lo que era aquello, ni lo que pasaba, se sentía alegre con el ir y venir de tantas personas comprando comida y objetos de regalo. No sospechaba que ese día sería el mejor de tantos otros, claro, infeliz criatura, cómo iba a saber?.

Él solo quería ayudar a cargar paquetes, alcanzarlos hasta el carruaje, o si alguno caía al piso lanzarse como bala para recogerlo y entregárselo al dueño. Y ganarse unos centavos de más, así se sentía útil para su familia.

La maestra de ese barrio, una de las que iba y venía cargada de paquetes, lo miró, e inmediatamente no recordó  haber visto esa carita en su aula. Se detuvo y lo miró fijamente y le preguntó:  cómo te llamas? Y él con esos ojitos de profunda tristeza le contestó: Juancito Torres. Y porqué no vas a la escuela ? no sé seño, mi mamá no puede llevarme. Y donde vives ? por allá al doblar ehhhh.  Llévame a tu casa, sí?

Juancito muy asustado tomó la mano a la maestra y la llevó hasta la puerta de su humilde casa. Frente a sus ojos azorados vió a una mujer jóven, aunque desaliñada podría verse la belleza de su cara, y la dulzura y tristeza de sus ojos. Buenos días... yo soy Aurora la maestra del barrio, me sorprendió ver a Juancito y no haberlo visto nunca en mi aula. Ud lo dejaría asistir ?
Ay señito, con mil amores, claro que sí!!  pero es que el es la única ayuda que tenemos acá en casa y con tres niños más, no puedo hacer tanto. Ud me entiende ?


La maestra había perdido a su familia en un accidente donde milagrosamente ella se salvó, vivía no muy cerca de allí, y le dijo: Ud a partir de hoy se vendrá a mi casa con los niños donde irán a la escuela y Ud a trabajar de acuerdo?.  Juancito aún no entendía nada pero de sus ojitos salían lágrimas de alegría.

Así fue como el  niño más pobre de la barriada se convirtió en un niño como tantos otros, gracias a Dios y a la bondad de aquella maestra de buen corazón. Ese año Juancito y sus hermanitos supieron lo que eran unas Navidades, un Fin de año y conocieron la existencia de los Reyes Magos.

Ma Angeles

País EU

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Respuestas a esta discusión

Hermosas  letras  que nos muestra el verdadero amor por los mas  necesitados... un cuento donde  el mejor regalo no es un juguete sino que valora la dignidad  de las  personas. Besos Maria de los Ángeles Alicia.

ALICIA

Humano, demasiado humano, un abrazo poeta.

KIN

Mi querida Ma. de los Ángeles...

Que historia tan bien contada!!
Me metí de inmediato en tu narración y sentí la alegría de juancito al obtener algo que quizá por su cabecita no había pasado esa noche de navidad.

Lindo cuento y agradada de leerlo.

Resultado de imagen para BARRAS NAVIDEÑAS

Cariños

GRACIAS AMIGA, ESPERO ESTES BIEN

ME ENCANTO LEERTE MUY BUENAS LETRAS.

M HORTENSIA

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Ando revisando  cada texto  para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.

Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.

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